Quito, 19 ene (La Calle). – Esta semana terminó con la noticia de que los Duques de Sussex dejarán de recibir fondos públicos y renunciarán a utilizar sus títulos de Alteza Real. La separación opacó al mismo Brexit.
Meghan y Harry dejarán de recibir la prestación del Ducado de Cornualles. Dinero que les supone hasta ahora el 95% de sus ingresos. Además dejarán de ser miembros oficiales de la Familia Real y deberán devolver el dinero de las reformas de su residencia, monto que costó a los contribuyentes británicos casi tres millones de dólares.
Inglaterra es uno de los países que mantiene un gobierno monárquico ¿Cuánto le cuesta a los ciudadanos los gastos de la familia real?
Las cifras
Según el medio digital argentino Radio La Pizarra, el costo anual para los contribuyentes ingleses es de 345 millones de libras esterlinas. Estos son unos USD 449 millones.
Esta cifra no cuenta los servicios de seguridad de cada miembro. Con ese rubro el monto sube a USD 650 millones. Además, por cada trabajador de la casa real se gastan USD 24 millones.
Los fondos anuales de la monarquía son más de lo que gasta el estado en la lucha contra el cáncer o las drogas. Con ese dinero, el gobierno podría emplear 15.000 nuevos maestros, 15.500 enfermeras o 17.000 policías.
Por otra parte, el salario que percibió la reina Isabel II en 2019 fue de USD 104 millones, 9% más que el 2018. Mucho de sus ganancias se ve reflejada en las propiedades que posee la familia real.
Los británicos, además, costean los viajes oficiales. En el período 2017-2018, la cifra fue de USD 7 millones.
La otra Inglaterra
Frente a las exorbitantes cifras que mantienen a los miembros de la familia real. La pobreza es un fenómeno que existe en el país a pesar de su status de primer mundo.
1 de cada 3 niños crecen en la pobreza. Esos son alrededor de 4 millones de infantes que viven en familias que sobreviven con menos de USD 5 al día.
Otros países reales
En España, otro país donde existen reyes, su manutención representa una cifra de USD 8.8 millones de los impuestos de los ciudadanos.
El dinero que va a la Casa Real lo distribuye el rey Felipe VI en función de sus decisiones.
Cuando el Congreso de los Diputados apruebe las cuentas, el monarca desglosa la partida para asignar los salarios de los representantes de la Corona (el suyo y el del resto de su familia), los gastos de personal y la cantidad destinada a la inversión e innovación tecnológica de Zarzuela y otros servicios.
