Pamela Benalcázar Villaba
Quito 20 mar (La Calle).- La Plaza de la Independencia fue el punto de encuentro de decenas de mujeres que se reunieron con el fin expresar su rechazo al veto presidencial que prohíbe la interrupción voluntaria del embarazo después de las 12 semanas de gestación en casos de violación.
Frente al palacio presidencial mujeres y niñas con su pañuelo verde gritaban consignas en contra de la resolución, pues sostienen que dicho veto es injusto y revictimiza a las víctimas de violación.
Entre las observaciones que plantea el veto está la obligatoriedad de presentar evidencias del delito con una denuncia o declaración juramentada, reduce las temporalidades sin importar que la víctima sea niña o mujer, sin discriminar si vive en la zona urbana o rural.
Finalmente, presenta la figura de objeción de conciencia, que establece que si la mayoría de doctores se niegan a realizar la práctica médica, todo el centro de salud no podrá realizar el aborto.
Varios colectivos feministas sostienen que el proceder de Lasso evidencia su odio y misoginia ante este grupo vulnerable. Argumentan además que Lasso gobierna con dogmas religiosos en un estado laico.
De acuerdo con las activistas, habrá más manifestaciones hasta que el presidente plantee una ley que garantice la protección de los derechos de las mujeres sobrevivientes de la violencia sexual.
En esta ocasión no se observó represión policial, contrario a lo suscitado el 8 de Marzo, cuando las mujeres fueron agredidas con golpes y gas pimienta. De todos modos, algunos policías se acercaron para tratar de detener la movilización.
Marcha anti derechos
La víspera, un grupo de personas que se oponen a la interrupción del embarazo en casos de violación llegaron a ese mismo lugar para expresar su apoyo a Lasso.