Quito, 30 nov (La Calle). – “Sí: la Ley Humanitaria ayudó a la generación de empleo”. Con esas palabras, el presidente Lenín Moreno defendió la creación de la Ley de Apoyo Humanitario y los cambios en la política laboral en los últimos meses. Sin embargo, en realidad, el reglamento que expidió va en contra de los intereses laborales del personal de salud.
En su programa “De Frente con el presidente” y acompañado del ministro de Trabajo, Andrés Isch, Moreno dijo que “si no fuera por la Ley Humanitaria, el escenario hubiese sido desastroso. La Ley permitía hacer acuerdo entre empresarios y empleados, arrendadores y arrendatarios. En el primer caso permitió el 6.7% de aumento del empleo y el 11% del paso de la informalidad a la formalidad”, expresó.
Denuncias resueltas
Isch añadió que existen 40.000 denuncias que fueron resueltas por el Ministerio de Trabajo por desvinculaciones durante la pandemia y que no existen denuncias sobre los acuerdos entre los empleadores. No obstante y por mencionar un ejemplo, los trabajadores de Explocen se mantienen en huelga por el despido de los empleados de la compañía y el Ministerio de Trabajo no ha intervenido de manera definitiva para subsanar el problema.
El Ministro agregó que 75.000 empleos se salvaron, 260.000 empleos formales se crearon y 5.000 empresas realizaron acuerdos de preservación de empleos. Todo, igualmente, bajo el efecto de la Ley Humanitaria.
Posgradistas, desemparados y sin respuesta
Horas antes del programa del Mandatario, los médicos posgradistas realizaron una protesta pacífica en contra del Reglamento de La Ley Humanitaria.
El documento, expedido por Moreno, indica en el artículo 40 sobre el concurso de méritos y oposición en relación a los profesionales de la salud. El mismo indica que el puntaje se basará en requisitos previos a la contratación con la mediación del Ministerio de Trabajo.
“La Ley decreta la estabilidad laboral para todo el personal de salud que trabaja durante la pandemia. Lamentablemente, emitieron un reglamento que contradice la normativa afectando los derechos de los médicos. Es por eso que queremos que se derogue el reglamento 10 y 40. Únicamente se toma en cuenta al personal médico que trabajó directamente con el paciente Covid-19, cuando hay todo un personal que está atrás de ello”, dijo la dirigente Ana Lucía Orozco a Radio La Calle.
