Quito, 09 nov (La Calle). – Las extorsiones llegaron a las escuelas y colegios de la Costa ecuatoriana. Los niños, niñas y maestros de las instituciones educativas tendrían que acogerse a un pago semanal para resguardar su vida y la de sus familiares.
La periodista Elena Rodríguez Yánez reportó que las organizaciones criminales que manejan las ciudades de Durán, Guayaquil, Babahoyo y Esmeraldas, comenzaron sus amenazas contra varias instituciones educativas. Así lo refleja en un supuesto comunicado que uno de los grupos dejó en las afueras de un plantel.
“Para su protección, la de sus estudiantes y sus maestros, deben cancelar la suma de 30 dólares semanales por cada maestro y tres dólares por cada estudiante para contar con nuestro cuidado y protección”, dice el comunicado.
Y si no, ¿qué?
“En caso de resistirse a cancelar los valores de protección, nos veremos en la necesidad de explotar sus aulas, o asistir a su domicilio”, concluye el mensaje.
Las autoridades correspondientes aún no se han pronunciado sobre el reciente hecho de amenazas para identificar si es verdadero o no. Sin embargo, aquello no solo aviva la inseguridad que vive la ciudadanía.
No es un hecho reciente
La alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, admitió la grave situación meses atrás. “Hasta niños de las escuelas están pagando vacunas. Los extorsionadores los esperan afuera de las escuelas y colegios y les piden desde USD 1”, mencionó Viteri. Además las amenazas también llegaron a los directores de las instituciones.
El Gobierno del presidente Lasso habría dispuesto la implementación de patrulleros a la salida de cada centro educativo. Moradores de distintas zonas han denunciado el incumplimiento de estas medidas.
¿Y la solución?
Viteri mencionó que una solución es “armar a los inocentes y desarmar a los delincuentes”. Así le solicitó al presidente Lasso mediante un video. (J.P.C)