Quito, 08 oct (La Calle). – El presidente ruso, Vladimir Putin, cumplió 70 años sumergido en una conmoción política, social y económica tras el ataque militar contra Ucrania.
Putin nació el 07 de octubre de 1952 en Petersburgo y antes de asumir el mandato ruso se desempeñó en puestos que ayudaron a redefinir el poder del país y sus intereses políticos. Tomó el mando por primera vez en el 2000 y fue reelegido en el 2012 hasta la actualidad. Durante esta trayectoria tuvo aciertos y desaciertos para el país.
Cuando él asumió el poder, Rusia atravesaba una inestabilidad que provocó el expresidente Boris Yeltsin. Implementó una serie de reformas que debilitaron al gobierno, medidas en las que incluso él dejó de ejercer algunas funciones. Otro quiebre que presentó fue el control que el Estado ejercía sobre los beneficios de la renta de materias primas.
La evasión de impuestos fue otra de las complicaciones, pues este fue el resultado de las privatizaciones que Yeltsin apoyó. Ante esto, Putin asume el poder con una administración con democracia dirigida. Es decir, un gobierno democrático en el cual el presidente tiene un poder fuerte, incluso con tintes autoritarios, según El Ciudadano.
Con Putin se evidenció un rápido crecimiento económico y estabilidad política. Restauró instituciones rusas en las diversas regiones del territorio, retomó el control de la renta de las materias primas y reconstruyó la industria rusa.
Para el mandatario, la disolución de la Unión Soviética representó la mayor catástrofe del siglo XXI por lo que su objetivo primordial fue reconstruir una Rusia fuerte y posicionarla internacionalmente. Ante esto, muchos compatriotas y autoridades rusas consideran que Dios puso a Putin en el poder.
Desaciertos en el mandato de Putin
Uno de los errores que cometió el presidente fue la intervención militar en Ucrania el 24 de febrero. Ahora, tras siete meses de conflicto, reveses militares, movilización de reservistas y sanciones internacionales aislaron a Putin diplomática, política y económicamente.
Como consecuencia de este conflicto se elevó el precio del petróleo, los mercados financieros de Europa y Rusia se desplomaron y los precios agrícolas se dispararon, entre ellos el trigo y el maíz. El trigo experimentó el incremento más alto desde el 2012.
Este fue uno de los detonantes para que el presidente celebre su cumpleaños en dos frentes. Uno rodeado de elogios por parte de su círculo y otro, aislado y criticado por países vecinos. (N.J.C)
