Quito, 31 ago (La Calle). – La población LGBTIQ+ expresó que vetar ciertos artículos del nuevo Código Orgánico de Salud (COS) sería “ajustarnos a posturas ultraconservadoras”.
El 25 de agosto, el Pleno de la Asamblea aprobó el COS, con 79 votos afirmativos, 8 negativos y 48 abstenciones. El texto contiene 405 artículos.
Centros de tortura
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) manifiesta que “los supuestos servicios de ‘curación’ de personas con orientación sexual no heterosexual carecen de justificación médica. «Representan una grave amenaza para la salud y el bienestar de las personas afectadas”, sostiene.
La comunidad LGBTIQ+ denunció que varios grupos “Provida” patrocinan estos centros de tortura de la orientación sexual e identidad de género, con “premisas teocráticas”.
El Art. 208 del COS prohíbe “la oferta de servicios que tengan como finalidad cambiar la orientación sexual o la identidad de género, por cualquier tipo de método o bajo cualquier circunstancia”
“Provida” no aceptan el Art. 193
El artículo 193 del COS prohíbe “la oferta o realización de procedimientos de asignación de sexo en casos de personas que nazcan con anomalías de indeterminación sexual”.
La comunidad LGBTIQ+ explica que este artículo sirve para que los médicos no reasignen o influyan a los padres de familia en los casos de personas intersex (características sexuales masculinas y femeninas en una misma persona), en su nacimiento, niñez o adolescencia.
Esta prohibición se respalda en varios años de procesos clínicos y consta en el “Protocolo de Atención integral a pacientes con desórdenes del desarrollo sexual”.
El veto vulneraría los derechos LGBTIQ+
A pesar que el COS tiene una baja inclusión en temas LGBTIQ+, es el inicio para que se respete y promueva los derechos pendientes en materia de orientación sexual e identidad de género.
Para la comunidad LGBTIQ+, el veto total o parcial de estos articulados significa “ajustarnos a posturas ultraconservadoras, retrocediendo drástica y consecutivamente”.
Políticos piden el veto del COS
El pasado 28 de agosto, el banquero Guillermo Lasso solicitó a Lenín Moreno, a través de una carta, el veto de los artículos 115, 193 y 208 porque responden a “una ideología altamente cuestionada y cuestionable”.
La vicepresidenta, María Alejandra Muñoz anticipó su posible renuncia en caso de que el Ejecutivo apruebe el Código.
Fabricio Correa aseguró que si llega a la Presidencia deslegitimará el Código Orgánico de la Salud. Se refirió a la vicepresidenta María Alejandra Muñoz y le pidió que renuncie en caso de que el mandatario no vete esta normativa.