Quito, 15 oct (La Calle).- Shirley Lizbeth Chafla Vintimilla desapareció el miércoles 30 de agosto de 2022 en Llano Grande, al norte Quito, según familiares se fue de casa en compañía de otra persona.
La menor de 15 años iba a ingresar a la Unidad Educativa Fiscal Brethren a primero de bachillerato. Su madre y padrastro notaron que ya no estaba en casa cuando regresaron del trabajo. En la habitación de Shirley encontraron una nota que especificaba que se marchaba supuestamente “por su propia voluntad”, debido a “problemas familiares”. Radio La Calle accedió a la carta de la pequeña antes de irse de casa.
Al ver que su hija no tenía amigos, familiares o allegados a los cuales acudir, le comunicó a su hermana, Yadira Vintimilla, lo sucedido. Vintimilla vio por última vez a Shirley, el martes 29 de agosto. Se presentó formalmente a la Fiscalía el 8 de septiembre de 2022 a poner la denuncia de la desaparición de su sobrina.
“Puse la denuncia para ver si algún familiar o conocido dice: Ella está aquí, pero no, ninguna persona nos dio razón de ella. Shirley no tenía amigos, ni familiares con quienes pudiera estar. Todos están tratando de localizarla y no hay respuestas”, enfatizó.
La tía de la menor expresó que no tenía amigos, pues era la primera vez que acudía a un colegio de manera presencial. En los años anteriores acudía de manera virtual. Por esta razón presume que su sobrina no se fue sola, sino que alguien tuvo que acompañarla.
Además, insistió a las autoridades que busquen en sus redes sociales. Shirley no tenía amigos cercanos, pudo conocer a alguien por internet que apoye su decisión. Sin embargo, las autoridades le dijeron que tenían que esperar y ver qué sucede.
Culpa de Bernal, según la Policía
Las autoridades de la Dinased dijeron que tenía que esperar porque todos los policías estaban concentrados en el caso Bernal. Hasta el momento solo han enviado informes, pero no dan respuesta sobre el paradero de Shirley, lamentó Yadira.
También acudió al Terminal Quitumbe, al sur de Quito, con la esperanza de que alguien sepa algo o haya visto a su sobrina, pero las respuestas mantuvieron su negativa. Solicitó a las autoridades pedir las grabaciones del terminal y comprobar si su sobrina compró un boleto.
“Ya van hacer dos meses de la desaparición de mi sobrina y no nos dan respuestas. Supuestamente iban a pedir las cámaras del terminal, pero nada. Siempre dicen que ya van a ver y nada”, recalcó.
Comentó que su sobrina no tenía un teléfono celular porque la mayor parte del tiempo pasaba con su madre o su padrastro. Esa fue otra de las excusas que utilizó la Policía para no hacer nada. “se encontraban atados de manos los uniformados”, cuestionó.
Otra alternativa de búsqueda
La tía de Shirley compartió su foto en redes sociales y una maestra del plantel le aconsejó que hable con su esposo que trabaja en la Fiscalía para ver si le puede ayudar. “El señor muy amable me dijo que sí me podía ayudar. Hablamos con el secretario de la Fiscalía y ese día también aceptó”, declaró. Sin embargo, el día que fue a rendir sus declaraciones el secretario amenazó con reportar al esposo de su maestra porque no tenía que pedir ayuda a nadie.
“Ya vieron incluso en migración y nada. Es claro que ella está con alguien más, porque eso de borrar mensajes y bloquear Facebook, no lo hace un familiar. La familia del papá está en otro país y también la están buscando”, dijo. (N.J.C)