Quito, 30 nov. (La Calle).- Al igual que con la Ley Anticorrupción que se ventila en la Asamblea Nacional, el Gobierno decidió no subir los salarios, para no irse en contra de la política de flexibilización laboral solicitada por el organismo de financiamiento. Así lo informó el economista Pablo Dávalos, quien expresó a Radio La Calle, que existe una relación directa entre la decisión del Ejecutivo y la postura del FMI.
Moreno anticipó el rechazo del Gobierno hacia un posible aumento del Salario Básico Unificado (SBU). Horas más tarde, el Ministerio de Trabajo oficializó el tema y fijaron los salarios para el próximo en año en USD 400 dólares. El economista Pablo Dávalos calificó la medida como una burla para los ecuatorianos.
En su nuevo programa radial, el primer mandatario compartió sus intenciones de mantener los salarios. Según el presidente, la nueva propuesta salarial se basa en criterios técnicos y libres de politiquería. Sin embargo, en entrevista exclusiva con Radio La Calle, el economista Pablo Dávalos criticó la decisión del régimen.
El acuerdo ministerial que oficializó el SBU para el próximo año alude a la inflación como un parámetro técnico. No obstante, Dávalos considera que el SBU no debe decidirse en función de la inflación. “El salario básico tiene que estar en función del costo de la canasta familiar, que está llegando a los 800 dólares este momento”, explicó el economista.
Crisis y desempleo
El Gobierno celebró el mantenimiento del salario básico junto con supuestos beneficios de la Ley Humanitaria. A criterio del ejecutivo, esa ley permitió incrementar el empleo en un 6,7%. Sin embargo, las declaraciones del Gobierno carecen de fundamento.
El economista Pablo Dávalos diagnostica, en realidad, un deterioro del nivel de empleo en los últimos meses. En el país, las cifras indican que el promedio anual de pleno empleo bordea el 50%. Actualmente, esos niveles están en el 32%. “Hay un deterioro de las relaciones laborales por la flexibilización laboral de la Ley Humanitaria”, comentó el economista.
Adicionalmente, Moreno celebró el establecimiento de un bono de USD 100$ para quienes perdieron su empleo durante la pandemia y, así también, un bono de USD 60$ para quienes accedan al nuevo salario básico. Estos incentivos se concederán una única vez.
Dávalos considera que este bono responde a medidas paliativas. “Si el presidente quiere realmente ayudar al pueblo ecuatoriano, que apoye la Ley de Renta Básica Universal”, exigió el economista. Según Dávalos, esa propuesta, sugerida por Naciones Unidas y CEPAL, permitiría salir a más de un millón de personas de la pobreza.
¿Qué esperar?
“A fin de robustecer la normativa que ampara y protege las fuentes de empleo, se enviará a la Asamblea Nacional, algunas propuestas de reformas laborales”, informa el comunicado gubernamental suscrito este lunes.
A criterio de Pablo Dávalos, lo que debe esperarse de estas nuevas reformas es el seguimiento de la carta de intención con el FMI. “El Gobierno no se mueve un milímetro por fuera de la carta de intención con el fondo”, subrayó el economista.