Otavalo: «Germán Cáceres paga su condena en una cárcel de privilegios»

Quito, 11 sep (La Calle).- La madre de María Belén Bernal, Elizabeth Otavalo, indicó que el femicida de su hija, Germán Cáceres, cumple su sentencia en una «cárcel de privilegios». La abogada fue asesinada en la Escuela Superior de Policía hace un año.

«¿Por qué los femicidas están en la Cárcel 4, un centro de privilegios? Yo no sé a los acuerdos que llegaron tras bastidores para que encubran tanto a Cáceres», apuntó.

Otavalo, en entrevista para Radio La Calle, aseguró que las promesas del Gobierno Nacional «solo fueron engaños». Recalcó que el presidente Guillermo Lasso creó el Ministerio de la Mujer para disminuir los índices de violencia e implementar su política de «femicidios cero». Sin embargo, a un año de la muerte de su hija y más de 250 asesinatos, no ha tenido resultados.

«Le subió de puesto a la señora (Paola Flores) y ella ni siquiera sabe cuántas mujeres fueron víctimas de femicidio en Ecuador», lamentó.

¿Medidas de reparación?

La madre de María Belén cuestionó que los «cómplices» de Cáceres todavía no son identificados ni cuenten con una sentencia en firme. Además, señaló que las medidas de reparación que dictó el Tribunal de Justicia «son absurdas».

En su momento, Lasso quiso destruir el Castillo de Grayskull -lugar donde asesinaron a María Belén- como una «señal de honra» a su memoria, pero eso quedó solo en palabras. Otavalo indicó que pidió una reestructuración en el centro, sin embargo, no la tomaron en cuenta.

«Qué pasa con los que ayudaron a sacar el cuerpo de mi hija. ¿Eso es justicia? Una que actúa a medias o solo para bajar la efervescencia de la gente», reprochó.

En cuanto al proceso judicial, mencionó que primó el espíritu de cuerpo, pues el Ministerio de la Mujer se orienta a las decisiones del SNAI. Enfatizó que el proceso de su hija debería tener un nuevo Tribunal. Sin embargo, tres fueron rechazados por la cercanía que mantenían con la abogada de Alfonso Camacho, otro supuesto implicado en el femicidio.

«A Cáceres no le duele nada. Él se reía en la audiencia, pero así es esta justicia. Ese señor debería estar en la cárcel de máxima seguridad», precisó.

«Si nadie nos cuida, lo haremos nosotras»

Otavalo apuntó que seguirá gritando y marchando en las calles para exigir que los derechos de todas las mujeres se respeten. Detalló que es la única alternativa ante un Estado fallido e indolente.

«Que nos llamen desestabilizadores, no importa. Eso seremos con el único afán de que ya no nos sigan matando», dijo.

Recriminó que las instituciones no estén orientadas en enfoque de género y no exista una coordinación, organización y acompañamiento pertinente. Explicó que los propios familiares de las víctimas tienen que hacer el seguimiento jurídico y administrativo ante la falla del régimen.

El día de su desaparición

La abogada María Belén desapareció el 11 de septiembre de 2022 en la Escuela Superior de Policía General Alberto Enríquez Gallo, en Pusuquí, al norte de Quito. Su cuerpo sin vida fue encontrado diez días después, en el cerro Casitagua, a unos cuatro kilómetros de distancia de la escuela de formación policial.

Los primeros sospechosos fueron Cáceres (expareja), la cadete de Policía, Josselyn Sánchez (con quien Cáceres mantenía una relación) y Alfonso Camacho (uniformado que estaba de guardia).

Sánchez fue privada de su libertad por cuatro meses, luego un juez de Quito le otorgó medidas cautelares y salió de prisión.

El magistrado determinó que no existen elementos de cargo contra ella. Según su defensa, Jean Paul Egred, se demostró que en el lugar donde asesinaron a María Belén no se encontró material genético de su cliente.

Camacho fue declarado inocente el 25 de mayo de 2023. La defensa de la familia Bernal mencionó que él debería ser sentenciado por el supuesto delito de omisión.

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