Los Fantasmas se cabrearon: la historia que la violencia nunca pudo borrar

Quito, 22 de dic, (La Calle).-“A veces le falta el aire”. Esta es la frase con la que se abre el libro.

Fue la selección la idea del prologuista de la obra, “Los Fantasmas se cabrearon”.

Pudo el prologuista Oscar Molina buscar otra alternativa, pero esa elección, esa incorporación de la obra al ritmo de la respiración de una persona no es casual.

Esta obra avanza al ritmo de la respiración de Purita Pelayo. Ella es la pionera de la organización Coccinelle y por ende de la despenalización de la homosexualidad en el Ecuador.  

Corrían los tormentosos finales de los ochenta y la represión explícita de León Febres Cordero golpeaba al país con su guante de hierro.

A veces aparecen ahogos, silencios en el testimonio de Purita, en especial cuando hay que recordar a quienes pagaron con su vida su derecho a vivir.

La Asociación de Gays, Travestis y Transexuales, Coccinelle fue reconocida legalmente en 1997, en medio de un ambiente de creciente violencia y de ignorancia.

En agosto de ese año, como se relata en la obra, la primera marcha en Quito para protestar en contra de la violencia para aquellas personas con una “orientación sexual diferente”. Allí se juntaron a los desaparecidos para levantar un solo grito de protesta.

Años después, el 17 de mayo de 2019, el día contra la homofobia, transfobia y bifobia, la nueva Coccinelle con el apoyo de Inredh, presentó una denuncia al Estado ecuatoriano por el “delito de lesa humanidad y a la persecución a las víctimas de represiones policiales intensificadas desde la década de los 80 hasta la dos mil”. Todavía se espera una respuesta, en todo caso, los fantasmas se cabrearon.

Ficha técnica:

Los Fantasmas se cabrearon.

Crónicas de la despenalización de la homosexualidad en el Ecuador

Autora: Purita Pelayo.

Severo Editorial-USFQ Press

Para la vos colección crónica.

Noviembre, 2021.

Disponible en librería Tolstoi, Tertulia y otras.

Apoya a Radio La Calle ($2,00)