Quito, 31 ene (La Calle).- Leonidas Iza se sumó al hashtag #SOSDerrameAmazonía en la plataforma twitter, con la que miles de usuarios mostraron su inconformidad contra el gobierno de Guillermo Lasso por la falta de atención inmediata y adecuada sobre las comunidades, flora y fauna afectadas por el derramamiento de Petróleo.
Todo esto, a raíz de la rotura del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP) en la zona limítrofe de la provincia de Napo y Sucumbiós. Esta zona es conocida como Piedra Fina (Vía Quito- Lago Agrio), el pasado 28 de enero.
El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) expresó su rechazo. Al mismo tiempo, explicó que en el Ecuador existe una condición permanente de riesgo. Aseguró incluso que no existen protocolos de alerta, prevención y mitigación adecuados para enfrentar estas eventualidad. “¡Es una historia que se puede repetir!”, expresó.
En su cuenta personal, el líder indígena, expuso un video perteneciente a la Fundación Alejandro Labaka. En él se evidencia que habitantes de la comunidad Sacha Urco experimentan ya los estragos de la contaminación. Además sientenfuertes olores resultado de la magnitud de la presencia del derramamiento de crudo en la zona.
Iza llamó al pronunciamiento urgente de la Corte Constitucional sobre el desastre ambiental que se registra en la Amazonía. En la zona existen nuevos casos de contaminación ambiental, nuevos derrames, y riesgo permanente a comunidades.
En el video que muestra la Fundación, y que replicó Leonidas Iza, se explica que el tiempo de recorrido que hicieron los habitantes para constatar la magnitud del derrame causado por la OCP ECUADOR fue alrededor de 3 horas sobre el río Napo; cerca de 300 km desde San Luis, en Napo (inicio) a Pompeya, Orellana.
¿Qué dice el Gobierno?
El Ministerio de Energía y Recursos Naturales No Renovables (MRNNR) sostuvo que el Comité de Crisis trabaja en el monitoreo y seguimiento de acciones en la zona afectada.
Según esta cartera de Estado, alrededor de 100 técnicos se encuentran desde el pasado viernes en constante tarea de contención con equipamiento especializado con bombas de presión y cauce, y material absorbente para la recolección de crudo con el fin de evitar mayores afectaciones ambientales.
Ni el Gobierno ni la empresa causante de la contaminación ambiental han informado la cantidad de petróleo derramado. La erosión del terreno y los socavones en esta área han obligado con anterioridad a cambiar el trazado de las tuberías que transportan crudo y sus derivados.