Quito, 04 may (La Calle).- La huelga de hambre iniciada este martes por la Unión Nacional de Educadores (UNE), se extendería hasta el 23 de mayo.
Frente al veto total de Lasso a las reformas de la Ley Orgánica de Educación Superior (LOEI), un grupo de maestros y maestras retomaron la huelga de hambre que hace 10 meses atrás llevaron a cabo y que duró 32 días.
Decenas de docentes decidieron agruparse en carpas, en las ciudades como Quito y Guayaquil, donde están dispuestos a solo tomar agua el tiempo que sea necesario, con el fin de que sus exigencias sean escuchadas.
Kléver Hidalgo, presidente de la UNE de Pichincha, precisó que entre los pedidos está la exigencia a la Corte Constitucional sobre la autonomía de sus funciones frente al Gobierno.
“Estamos demandando a la Corte que ratifique los textos aprobados por la Asamblea Nacional”, dijo Hidalgo.
Por su parte, Isabel Vargas, presidenta de la UNE, dijo que algunas acciones legales ya fueron presentadas.
“Hemos presentado un amicus curiae, tanto la Unidad Popular, la UNE y los abogados de los diferentes sectores, a fin de que nos den audiencia para poder defender el informe de la Asamblea Nacional que está bien elaborado”, expresó Vargas.
Según Lasso, el veto total impuesto por el Ejecutivo a la reforma de la LOEI, se debería a que esta no fue considerada bajo un análisis de factibilidad financiera para un incremento salarial a los maestros.
Frente a esta acción constitucional, el anterior 22 de abril, el Legislativo pidió a la Corte Constitucional su pronunciamiento y la resolución de la vigencia de las reformas de la LOEI.
Para Hilario Beltrán, presidente de la UNE de Guayas, la huelga de hambre no será la única medida que se tome para exigir sus derechos. También se hablá de plantones y no descartan tomarse las calles.
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