Quito, 12 Mar (La Calle).- Francisco Ramírez, director técnico del Club Ñañas, analizó la evolución del fútbol femenil en exclusiva para Radio La Calle. El estratega confía en que la continuidad de los procesos futbolísticos son indispensables para potenciar la competitividad en la Superliga Femenina 2021.
El arranque de la Superliga
Para la presente campaña, las escuadras de Espuce y Academia Sport JC se integrarán a la primera categoría del fútbol ecuatoriano. Esto luego de obtener el ascenso en la Liga de Fútbol Amateur Femenino.
“Hay que felicitar a Espuce por ascender. Ha sorprendido a todos pese a no contar con la infraestructura necesaria. En el Club Ñañas nunca subestimamos al rival. En cada partido iremos con todo”, detalló el entrenador respecto de las nuevos rivales que deberá encarar en este 2021.
Consolidar un estilo de juego
“Es el primer año en el que tenemos una base que posee experiencia de temporadas previas. En su mayoría todas las chicas se han mantenido en el equipo, esto facilita que las futbolistas dominen el modelo de juego y sistema táctico con el que nos desenvolvemos desde hace 4 años”, manifestó el estratega ecuatoriano.
Ramírez contará con el 80% de jugadoras que participaron en la edición 2020 del torneo femenil. Una ventaja respecto de pasados años. También, un factor que abre la puerta para la consolidación de su juego.
La evolución del fútbol femenino en el país
Luego de que la participación del CD El Nacional en la Copa Libertadores Femenina finalizará con la obtención de un empate y dos derrotas (incluida una goleada de 16-0 ante Corinthians), varias incógnitas se revelaron. Una de ellas, ¿cuánto ha avanzado realmente el fútbol femenino en el país?
Para Francisco Ramírez, una de las razones por las que el fútbol femenino ecuatoriano aún no puede competir con otras ligas extranjeras tiene que ver con la dificultad para continuar con los procesos.
“Las chicas que clasificaron a la Copa Mundial de Cánada 2015 culminaron su proceso luego de competir en el torneo (…) Pero existió un desfase. Pongamos el siguiente ejemplo: cuando un estudiante culmina el bachillerato, empieza la universidad, luego un masterado y finalmente un PHD. En este caso. a la selección de Ecuador solo acabó el bachillerato. Le faltó un tíitulo de tercer nivel, ahí está el desfase”, argumentó Ramírez.
Para el estratega del club Ñañas, el momento ideal para invertir de forma decisiva en el fútbol femenino en Ecuador debía ser posterior a la participación del Mundial de Canadá. Sin embargo, nunca se pudo generar un nuevo proceso para evolucionar futbolísticamente. “Ha 5 años desde la clasificación. Había que cumplir etapas mas no acelerarlas. Hemos cumplido procesos a medias. ¿La Federación Ecuatoriana de Fútbol ha invertido mucho? Sí. ¿Se ha invertido más que antes? Sí; pero ha faltado algo” detalló Ramírez.
Entrenadores ecuatorianos al frente
Para Ramírez, la gestión que ha desarrollado la brasileña Emily Lima a cargo del banquillo de la “Tri” femenina es clave. No obstante, admite que es responsabilidad de los clubes, desde los que se encuentran en el ascenso hasta los de primera categoría, aportar con sus propios procesos para que así una nueva generación de futbolistas pueda competir al más alto nivel.
“Estoy satisfecho de tener a Emily Lima en el banquillo. Ella debe canalizar todas las categorías con el mismo modelo de juego que en la categoría principal”, explicó el entrenador.
Otro punto clave para Ramírez está relacionado al papel que juegan los directores técnicos ecuatorianos. Para él, es indispensable que el asistente técnico de los estrategas extranjeros sea nacional. De esta manera los conocimientos del DT principal podrán ser empleados por sus asistentes en un futuro.
“Es necesario que el asistente técnico de los entrenadores extranjeros al frente del equipo nacional sea ecuatoriano. Ahí deber estar un ecuatoriano o ecuatoriana, principalmente porque conoce las fortalezas de la futbolistas nacionales. Además debe enriquecerse de los conocimientos de ese estratega extranjero. Así cuando esos entrenadores se retiren, los conocimientos obtenidos por su experiencia se quedan aquí, esos son procesos”, enfatizó Francisco Ramírez.
Un nuevo proceso
El detalle final abordado por el DT Francisco Ramírez está relacionado al aprovechamiento de las capacidades físicas de las jugadoras ecuatorianas. El objetivo, poder rivalizar con futbolistas de otros países.
“Hay que analizar el somatotipo (teoría que asocia los tipos de cuerpos humanos con tipos de temperamentos) de la jugadora ecuatoriana. No podemos ir afrontar partidos en desventaja: por mas condiciones técnicas y tácticas o físicas, no puedes enfrentarte a otro equipo que de promedio de estatura posee 1.70 cm; cuando nuestros equipos son de 1.60. Eso influye en el juego. Se debe analizar el somatotipo de jugadoras nacionales. En nuestro país tenemos riqueza en somatotipo”, concluyó el director técnico del Club Ñañas.