Quito, 30 dic (La Calle). – La madrugada del miércoles 30 de diciembre del 2020, Argentina aprobó la Ley del aborto hasta la semana 14 de gestación. De esta forma se abre la posibilidad de que las mujeres que decidan interrumpir un embarazo lo realicen de forma legal, segura y gratuita.
Argentina se suma a los otros países de América Latina donde el aborto está aprobado sin importar la causal como: Uruguay, Cuba, Guyana, Guayana Francesa, Puerto Rico y algunas partes de México.
A las cuatro de la mañana de Argentina el Senado aprobó la Ley, enviada por el presidente Alberto Fernández. La votación fue así: 38 votos a favor, 29 en contra y una abstención. La «marea verde» argentina representativa de la lucha feminista, se mantuvo de pie en los exteriores del Senado durante toda la votación.
El pasado 11 de diciembre, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de Ley, tras 22 horas de sesión. El articulado finalmente pasó por el debate del Senado convirtiéndose en Ley.
Piezas clave
El Ejecutivo
Desde el inicio de sus funciones, el presidente Fernández contempló la despenalización del aborto en su campaña electoral y el paso de esta Ley al Congreso.
En noviembre del 2020, Fernández envió el proyecto de Ley al Congreso. Es de alto valor simbólico que el proyecto de Ley haya tenido su origen en el poder Ejecutivo, a la cabeza de Alberto Fernández, y no en un partido de oposición.
En su momento, el presidente de Argentina dijo: «la criminalización del aborto de nada ha servido, solo ha permitido que ocurran clandestinamente en cifras preocupantes».
La Marea Verde
Se trata de uno de los movimientos más grandes y antiguos de la lucha feminista de la República Argentina. La Marea Verde estuvo al frente de los logros del voto femenino, protección de niños y niñas e igualdad de derechos.
La Marea expandió los plantones y manifestaciones públicas hacia congresos y asambleas, convirtiéndose en un movimiento político-social referente para América Latina. El color verde se convirtió en simbología importante del feminismo latinoamericano a partir de la lucha por la despenalización del aborto.
Los legisladores
Algunos senadores cambiaron su voto en apoyo de la Ley. En 2018, el articulado ganó por seis votos en Diputados y perdió por siete en Senado, en 2020 ganó por 14 en Diputados y por nueve en el Senado. El Legislativo está ocupado en su mayoría por funcionarios conservadores.
Este es el caso del legislador opositor Sergio Leavy, quién argumentó: “me he dado cuenta de que la ley no obliga a abortar”. En el caso de la Diputada Flavia Morales aseguró que desde 2018 “he reflexionado. La penalización no logra evitar que muchas mujeres realicen esta práctica y más aún en la clandestinidad. En efecto, la intervención del Estado, en este momento, es fundamental».
En 2018, incluso, la misma Cristina Kirchner se oponía a la Ley de aborto, pero otorgó su voto a favor con la justificación de que su hija la “convenció”.
Según datos del Ministerio de Salud, en 2005, Argentina registró entre 350.000 y 500.000 abortos clandestinos al año. En 2018, la misma cartera de Estado evidenció 35 muertes de mujeres embarazadas a causa de abortos mal practicados.