Quito 26 de ene (La Calle). – El Ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos vive un asedio. En redes circula una petición para conseguir su renuncia y el Defensor del Pueblo solicitó su renuncia al Presidente de la República.
Para colmo hoy tiene fecha para su juicio político: 8 de febrero.
El Ministerio de Salud Pública y su ministro están a punto de convertirse en un fusible para rebajar las tensiones políticas.
¿Qué pasó en salud?
Después de Verónica Espinosa que ejerció su cargo desde 2017-2019, asumió una funcionaria de carrera como Catalina Andramuño y finalmente, Juan Carlos Zevallos, quien está en el cargo, desde marzo de 2020.
En su gestión, los hospitales del Ecuador se volvieron el eje de una red de corrupción dolorosa e indignante: la compra y venta de insumos médicos, como de medicamentos que podrían servir para el combate contra la COVID 19 y enfermedades inmunodepresoras.
Casi al inicio de su gestión se ofertaron dos millones de pruebas para detectar COVID-19 nunca llegaron, poco después se armó un frente con los posgradistas.
Se puede afirmar que Juan Carlos Zevallos, llegó la pandemia o al revés la pandemia llegó con Juan Carlos Zevallos.
En varios pronunciamientos del funcionario de salud no manejo una adecuada transmisión de información de la pandemia, pero ese es otro tema.
Sofía Cabrera, docente de la Universidad Tecnológica Equinoccial, afirma que desde el inicio de la pandemia, el ministerio no supo cómo comunicar.
“Hace un año, un ciudadano chino llegó al país, aparentemente con el virus. La ministra, de ese entonces, no supo manejar esa situación”.
Desde entonces, empezaron los desatinos, no pudieron articular un discurso oficial de un problema institucional «muy grave”.
“En divulgación científica no hay que perder el rigor, hay que utilizar otros contenidos para que la ciudadanía entienda que se quiere decir”, sostiene Cabrera,
Según la entrevistada estamos en una crisis institucional de comunicación, producto del mal manejo “para trasladar discursos científicos a un lenguaje cotidiano, tomando en cuenta que muchos discursos quedan grabados”.
El Ministro Zevallos vino desde una fuente académica, como muchos de los ministros del régimen, una universidad en la que fue docente María Paula Romo, es decir no conocía algunas características vitales que implica la gestión pública estatal.