Quito, 02 ene (La Calle). – El abogado Fausto Jarrín Terán explicó, para este medio, que las medidas cautelares se presentan con base en el traslado “arbitrario” que enfrentó Jorge Glas a la cárcel de Latacunga, poniendo en riesgo su salud.
Con estas medidas, la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos considera que la salud y seguridad de Glas están en riesgo y solicita al Gobierno de Lenín Moreno la conformación inmediata de una mesa de concertación con la participación de familiares y abogados para realizar una suerte de negociación. Esta reunión tendría como fin principal llegar a un consenso en cuanto a soluciones óptimas para la situación del ex vicepresidente.
Jarrín aseguró que el día de mañana, viernes 3 de enero, se reunirá con los familiares del procesado para reunir las solicitudes respectivas que servirán en la negociación de la mesa mencionada.
La expectativa del abogado, para este consenso, se enfoca en el regreso de Jorge Glas a la cárcel No. 4 de Quito, con el fin de garantizar su salud en “clínicas y hospitales con mayor nivel de capacitación médica para atender una emergencia”. Además, de facilitar el acercamiento con la defensa de Jorge Glas y con las visitas familiares.
De la misma forma, consideran la posibilidad de solicitar, bajo el amparo del derecho humanitario, arresto domiciliario. Esta posibilidad se torna compleja debido a que la normativa de la defensa de Glas no contempla esta opción.
Por el momento, la (CIDH) no se ha pronunciado sobre la posible liberación de Jorge Glas. Sin embargo, Fausto Jarrín considera que, el reconocimiento que hace la CIDH en cuanto a la “existencia de anomalías y afectaciones a DDHH en un proceso es una buena señal de que el Estado está siendo observado por organismos internacionales y así se deje de perseguir políticamente a los opositores”
CLL