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Con más de 400 muertos, Lasso habla de dignidad en las cárceles

Quito, 10 jul (La Calle).- El presidente de la República, Guillermo Lasso, firmó un decreto para indultar a 130 mujeres detenidas. Según el mandatario, las reclusas estaban en situación de vulnerabilidad y habrían cometido delitos de “baja peligrosidad”.

El jefe de Estado ha tenido más de dos años para hacer este tipo de cambios. Sin embargo, a menos de cuatro meses de acabar su mandato, se percata de la situación de estas mujeres y del resto de personas privadas de libertad (ppl). Eso sin contar el número de muertes violentas dentro de los centros de rehabilitación social.

No obstante, el mandatario afirmó que los presos han perdido la libertad, “pero no la dignidad”, cuando en su mandato las muertes dentro de los reclusorios pasaron los 400 fallecidos.

De la misma manera, el jefe de Estado aseguró que los reclusos son una de sus prioridades. Sin embargo, la mayoría de detenidos aseguró que la calidad de agua que consumen es regular. 13.690 personas aseguraron que es regular, mientras que 9.481 sostuvieron que la calidad del agua es mala.

Más promesas de Lasso

El 12 de mayo, el Servicio Nacional de Atención a privados de libertad (SNAI) contempló la construcción de cinco cárceles más en Ecuador hasta 2025. Sin embargo, el Gobierno de Lasso tiene sólo hasta Octubre para “mejorar” el sistema en los centros de privación de libertad.

Además, Lasso sólo ha invertido el 31 % de todo el presupuesto destinado para seguridad en 2022. Según el plan anual de inversiones 2022 (PAI), el régimen invirtió en el Ministerio del Interior el 0 % de todo el presupuesto, en Defensa Nacional el 33 % y para servicios de cárceles a penas el 21 %.

El presupuesto destinado para esta institución y el Sectorial de Asuntos Internos fue de USD 105,7 millones, pero solo utilizaron USD 47 millones. De toda esa cifra el SNAI recibió solo USD 7,6 millones de los más de USD 31 millones que estarían destinados. Es decir, se utilizó menos del 25 %.

El Gobierno Nacional había prometido, para 2022, mayor generación de empleos, estabilidad fiscal, manejo honesto y eficiente de los recursos. Sin embargo, la seguridad y el orden en Ecuador fue uno de los últimos puntos que consideró el jefe de Estado.

Mujeres detenidas

Las mujeres representan el 6 % de todos los privados de libertad; sin embargo, atraviesan situaciones de vulnerabilidad. En las penitenciarias hay 19 mujeres embarazadas, 25 con enfermedades catastróficas y 212 padecen algún tipo de discapacidad.

De la misma manera, hay casi mil reclusas que están en la cárcel por tráfico ilícito de sustancias. No obstante, el robo y el homicidio son los delitos más cometidos, después de ese.

Las personas que obtuvieron el indulto presidencial tuvieron que cumplir cuatro requisitos:

  1. Tener sentencia condenatoria ejecutoriada por los delitos de robo, sin causar la muerte o lesiones en la víctima.
  2. Haber tenido buen comportamiento dentro de la cárcel, es decir, no tener sanciones de disciplina.
  3. No tener otras sentencias condenatorias u otras medidas cautelares.
  4. No tener otro proceso penal pendiente en su contra.

Además, fueron absueltas las reclusas que padecían alguna enfermedad terminal o catastrófica.

“El primer censo penitenciario”

El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), junto al Servicio Nacional de Atención a privados de libertad (SNAI), realizaron el primer censo penitenciario para conocer las situaciones sociodemográficas de los reclusos.

Según, Roberto Castillo, director del INEC, realizar este censo tomó 40 minutos por detenido, ya que se los entrevistó uno por uno. No obstante, no todos accedieron a ser censados.

En el Ecuador hay 31.321 detenidos, de los cuales 29.356 son hombres y 1.965 son mujeres. De la misma manera, en las cárceles hay un 10% de presos que son extranjeros.

El censo penitenciario demostró que hay una sobrepoblación en las cárceles del país, pues la capacidad es de 30.134, lo cual identificaba un excedente de 1.187 ppl. Es importante señalar que el registro de datos a la fecha varia, ya que la población de los centros penitenciarios es fluctuante.(DCJ)

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