Quito, 4 mar (La Calle).- El peleador nacional de artes marciales mixtas (MMA) Christian Alquinga contó su historia deportiva en radio La Calle.
Con una infancia labrando la tierra en su natal Tumbaco (alrededores de Quito), junto a su papá, Juan, el deportista considera que la “lucha representa todo para mí”.
Luchador desde los 13 años, el tumbaqueño empezó entrenando con Vinicio Zuleta en la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP).
El tricolor no reniega de su niñez, más bien se enorgullece de sus inicios y de la forma en la que su padre lo crio.
“Era un hombre bravo, pero me enseñó muchas cosas como nunca rendirme y a pelear por mis sueños”, recordó.
Christian extraña a su papá, quien falleció cuando él era un niño. En principio Juan no quería que sea luchador porque “era muy peleón”, dijo entre risas.
Sin embargo, a los 13 años inició en el deporte. “Antes de ir a los entrenamientos trabajaba en un taller mecánico y luego iba a las prácticas”, rememoró.
Christian Alquinga supera los golpes duros
Los golpes duros han sucedido en la vida de Christian Alquinga. A la muerte de su padre se sumó la de su hijo Juan, quien murió de cáncer.
No obstante, esas pérdidas lo han hecho fuerte y le prometió a su pequeño “luchar hasta el final, como él lo hizo”, durante su enfermedad recordó.
Carrera deportiva
Alquinga empezó en la CDP y al subir de categoría se consagraba campeón en la que estaba. También se coronó a nivel nacional y en 2017 participó en los Juegos Bolivarianos.
El objetivo más grande que tiene “Bull Kong”, como se lo conoce también, es “ser inspiración de otras personas y superar a mi papá en ser mejor persona”, dijo.
“Bull Kong” se inspira en su hijo
El apodo de “Bull Kong” nació de su hijo. Primero a él lo conocían como “Kong” y al ver como el pequeño Juan se aferraba a la vida lo llamó “Bull”.
Entonces para “rendirle un homenaje y hacer algo grande por él, decidí llamarme “Bull Kong”, para que todo el mundo sepa de mi hijo”, comentó el tricolor.