Quito, 27 mar (La Calle).- La empresa Servicios Exequiales del IESS se encuentra envuelta en presuntos actos de corrupción y sobreprecios. La nueva administración del Seguro Social busca a los responsables.
Desde la compra de carpetas que tienen como precio original $ 0,45 a un costo de $ 2.25 por unidad, hasta el alquiler de capillas ardientes en $ 6.500 cuando en realidad su costo es alrededor de $ 1.500, son algunas de las pruebas que van apareciendo a diario. Se presume estarían involucradas las anteriores gerencias de Pablo S. y Daniel G.
Además, se habla de una supuesta vinculación familiar entre el dueño de la imprenta que funciona como intermediaria con uno de los exgerentes.
«Todos los días aparecen nuevos actos de corrupción y nuestra meta es hallar a los responsables», declaró Nicolás Díaz Rendón, nuevo gerente de la empresa.
Entre los documentos que corroboran el delito están correos electrónicos, facturas y estados de cuenta. Estos, servirán como pruebas para auditorías de Contraloría y el proceso legal en la Fiscalía.
El Seguro Social: «víctima de carroñeros»
El vicepresidente de la Asociación de Afiliados, Jubilados y Pensionistas del IESS de Pichincha, Henry Llanes considera al Seguro Social una institución sin control. Además, asegura «es manejado por los gobiernos como un botín político».
«El IESS debe poner a personas capacitadas en esos puestos gerenciales. En lugar de eso, inflan la burocracia para compensar los favores políticos. El Seguro Social ha sido víctima de los carroñeros», dijo en una entrevista para diario Expreso.
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