Quito, 18 feb (La Calle).- Los Boy Scouts of America (BSA) se declararon en bancarrota este martes, para usar un plan de compensación con las víctimas de abuso sexual dentro de la organización. De esa manera, los BSA buscan seguir después de 110 años de historia tras el destape del escándalo en 2012.
Al declararse en quiebra, los procesos civiles en contra de la institución quedan sin efecto, lo que afecta las denuncias de miles de supuestas víctimas de abusos. Ahora las demandas serán presentadas al Tribunal de la Bancarrota.
Aproximadamente, 12.000 jóvenes entre cinco y 21 años habrían sido víctimas de abusos sexuales por parte de 7800 monitores y líderes, solo en Estados Unidos. Los Boy Scouts of America son una organización juvenil, cuyo objetivo es la formación de gente con capacidad de liderazgo a través de las actividades al aire libre.