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La represión y persecución sacude nuevamente a Ernesto Flores Sierra

Quito, 20 may (La Calle). – En 1986, Ernesto Flores tenía apenas dos años y medio cuando el aparato represivo del gobierno de León Febres Cordero asesinó con saña a sus padres José Luis Flores y Sayonara Sierra. 36 años después, el aparato persecutorio va contra él por pertenecer al Movimiento Guevarista.

El caso Manuela Sáenz

Según el informe de la Comisión de la Verdad (2010), el 29 de septiembre de 1986, miembros de la Policía Nacional recibieron la orden de allanar una casa en la calle Manuela Sáenz. Presumían, según investigaciones anteriores, que la vivienda servía de casa de seguridad para los miembros del grupo Alfaro Vive Carajo (AVC). El operativo se produjo a las 23:00 y en la casa estaban: José Luis Flores, Sayonara Sierra y Robert Regalado.

Aunque el parte policial indicaba que hubo un enfrentamiento y que las tres personas murieron por los disparos recibidos. Testimonios recabados a lo largo de los años por los familiares de las víctimas expresan que se trató de ejecuciones extrajudiciales.

De acuerdo con el padre de Sayonara, la policía entró a la vivienda tras amenazar a la familia propietaria del inmueble para dejarlos pasar. Amordazaron a los jóvenes y procedieron a ejecutarlos. En las denuncias se habla inclusive de violación por parte de los policías hacia Sayonara por los restos de semen que se habrían encontrado en su cuerpo.

Aunque Sayonara no era parte de AVC, una conclusión a la que llega el informe visitaba regularmente a su esposo cuando entró en la clandestinidad. Aún así los informes de la Policía la tenían en la mira como miembro del grupo. Hasta 2008, muchos vecinos tenían miedo de declarar lo que había sucedido esa noche.

“En este punto, debemos resaltar que un equipo interdisciplinario de investigadores de la Comisión de la Verdad visitó el lugar de los hechos en febrero de 2009. Tal como denuncia Orlando Sierra en su oficio, y aún 23 años después del operativo, las personas que viven en el vecindario se niegan siquiera a hablar sobre lo ocurrido. En ningún caso fue permitida la grabación en audio, ni quieren hacer públicos sus nombres. Los dueños de la casa allanada en septiembre de 1986 viven en el inmueble todavía; al identificarse el equipo investigativo como de la Comisión de la Verdad, literalmente, le cerraron la puerta”.

Revise el caso completo aquí: https://www.corteidh.or.cr/tablas/26980.pdf

Prisión preventiva para Ernesto

La tía de Ernesto, Natalia Sierra ha sido clara en responsabilizar al gobierno si algo le sucede a su sobrino. La familia atraviesa por segunda vez la persecución del gobierno. Ocho miembros del Movimiento Guevaristas guardan prisión preventiva. La Fiscalía los acusa de por presunto delito de trata de personas con fines de reclutamiento forzoso para conflictos armados.

De acuerdo con las autoridades, en los allanamientos se levantaron varios indicios como la posesión de armas de fuego y municiones. Además, Fiscalía dice que la agrupación hacía acercamientos en comunidades de Cotopaxi, Chimborazo y en el Oriente. Esto con la finalidad de formarlos militarmente en la frontera de Colombia – Venezuela. MIB