Quito, 14 feb (La Calle). – La prefecta de Azuay, Cecilia Méndez, expresó su respaldo total a Paola Pabón. La prefecta de Pichincha recibió fuertes críticas y ataques por su decisión de aprobar la ordenanza de la tasa solidaria para la vialidad rural.
“Necesitamos que haya un proceso de reconocimiento y contribución de la ciudad al campo, para poder sostener la vida humana”, dijo durante una entrevista con Radio La Calle.
Urbano y rural
La prefecta recalcó que Azuay fue el pionero en impulsar esta contribución de la ciudad al campo. La tasa solidaria se puso en discusión y se aprobó en el año 2007.
Además, expuso que en el caso azuayo, la tasa solidaria fue destinada específicamente para las vías. Cuando se realizó la primera reforma en el 2015, este aporte dejó de ser exclusivo para la viabilidad y pasó fundamentalmente al rubro de maquinaria.
Méndez sostuvo que uno de los elementos que perjudicó el manejo de la tasa solidaria fue el desvío de estos fondos y que, a partir del 2015 se comenzó a cobrar una tasa elevada a los transportistas.
“En 2020 se pone a discusión la eliminación de la tasa solidaria. Los reclamos de los transportistas fueron que los fondos no estaban destinados a la exclusividad vial y existía un cobro excesivo, por eso se eliminó”, aseveró la prefecta.
El apoyo
También aseguró que los gobiernos provinciales tienen la obligación de defender el concepto y la materialidad de la tasa solidaria. “El Azuay ha considerado absolutamente necesario, resguardar con su voz y apoyar al gobierno provincial de Pichincha”, reiteró.
La prefecta expresó la importancia y necesidad de que la ciudad tenga la capacidad de generar una política de equidad con la ruralidad. “Quisiera decirles a los ciudadanos del Ecuador que piensen en nuestro país, que es justo que la ciudad contribuya con el campo”, afirmó.