Quito, 08 ene (La Calle). – Priscila Schettini respondió, mediante un tweet, al asambleísta del oficialismo Diego Ordóñez, quien la llamó “instrumento del Correismo”.
«Señor Diego Ordóñez , yo no soy instrumento de ningún partido político. Qué cree, porque soy mujer y porque soy esposa no tengo derecho a denunciar. Mejor póngase a trabajar, que los documentos que envíe a 137 asambleístas son contundentes y claros. Su odio y machismo daña a la sociedad», publicó Schettini.
Contexto
Este conflicto se suscita luego que Priscila Schettini, esposa del ex Defensor del Pueblo, Freddy Carrión, entregase documentación a la Asamblea Nacional con presuntas pruebas y antecedentes que, según ella “constituyen una clara muestra del uso indebido del sistema de Justicia del Ecuador para perseguir política y judicialmente a una persona”.
Con este escrito, Schettini solicitó a la Asamblea Nacional, en el marco de sus competencias, que inicie la investigación correspondiente para censurar y destituir, mediante juicio político, a la Fiscal General del Estado, Diana Salazar, por, supuestamente, incumplir con sus funciones.
Enseguida, el parlamentario Diego Ordoñez no tardó en reaccionar ante las acciones de Schettini y, mediante un tweet en su cuenta oficial, dijo:
«El añorado deseo del Correismo: Sacar a la Fiscal que encarceló a Correa y sirve de instrumento la esposa de Carrión, sentenciado por un delito sexual. Vaya ¡qué avezados son!»
Se le está haciendo costumbre
Esta no es la primera vez que Diego Ordoñez realiza desatinadas declaraciones.
El 4 de noviembre de 2021, el asambleísta escribió en un tuit «Pasar del tubo a la curul y surgen estás «argucias torpes». El tuit citaba a una publicación de 4 Pelagatos sobre Mónica Palacios. El legislativo por CREO fue denunciado por violencia política y sancinado con una suspensión de 15 días, sin sueldo.
Asimismo, el 14 de diciembre de 2021, la abogada Dolores Miño expresó su apoyo a la sanción de Ordóñez, a través de su cuenta de Twitter. El parlamentario le respondió «A ti te da gusto todo lo que sea en contra de un hombre».
Miño respondió recordándole su posición de funcionario de elección popular y el respeto hacia la dignidad de los demás. «Qué vergüenza, asambleísta que en su posición se ponga a hablar así a sus mandantes. Le recuerdo quiénes pagamos su sueldo, antes de tratarnos con semejante displicencia».
La respuesta de Ordóñez fue mordaz e irrespetuosa. «Recibes la respuesta que mereces. Y así pienses que soy tu subordinado ¡Qué nivel!»