Por: Alexis Ponce / defensor de DD.HH.
Diana, Villavicencio y La Posta: ¿SERÁ QUE INVESTIGAN A LASSO?
Si en la gigantesca lista mundial de inversiones oscuras off shore y mega-evasión de impuestos que, en el mundo entero, se ha publicado este domingo 3 de octubre en titulares de casi todos los diarios del planeta, dando a conocer por Ecuador en aquella lista el nombre de Guillermo Lasso; si en lugar de aquel, el apellido que aparecía era «Correa» o «Iza»; este rato el periodista de investigación y ahora diputado y presidente de la comisión de fiscalización, o la comedida Fiscal de las élites (que tiene represadas la Lista VIP; los Ina- Papers; y los apoyos de la española Citizen-Go a la ultraderecha local); ya hubiesen dado rueda de prensa en pleno domingo y pedido que -de una- intervenga la Interpol y hasta solicitado
la colaboración internacional o abierto otra causa para la extradición y proceso judicial rapidito.
Y «La Posta», pautada sin vergüenza, hubiera lanzado alguna barbaridad macarthista típica del periodismo pautado.
El doble rasero ético y mediático de los Ortiz, los 4 Pelagatos y todo el largo etcétera es tan criminalmente inmoral y sinvergüenzamente delictivo como el capital (off shore) fuera de su patria.
Ya veremos cuánto demoran en investigar y sancionar a Lasso, tanto la Sra. Salazar como el Sr. Villavicencio.
Hasta tanto, la clase alta y lo peor de la clase media, justamente donde abundan sus fans, son «la prueba de clase», de que si tenemos gobiernos, políticos y banqueros corruptos, es porque también tenemos una élite corrupta, una lumpen-aristocracia corrompida, una clase media sin valores ni cacúmen.
Mientras el mundo entero identifica a Lasso y a Ecuador con la matanza carcelaria, con tanques de guerra en los patios de las cárceles y con la imbécil negativa a dar la comida a los presos, al peor estilo presidiario narrado por Víctor Hugo; mientras somos recordados con el mismo Lasso como el país que quiere imponer un proyecto de ley laboral abyectamente patronal y una de las más retrógradas legislaciones del trabajo en el planeta, que nos devuelven a octubre de 1922; mientras las páginas de los diarios del mundo publican el nombre de Lasso en la lista de «Pandora Papers»; acá las clases altas y sus ovejunas clases medias, han llenado redes y tuits con la brutal justificación (miseria de su pobre filosofía) «¿Y cuál es el problema si tiene su dinero bien habido en el exterior?».
Esa pilluela y aldeana clase alta y esa ignorantona clase media, hablan como viven, actúan y piensan. Para ellas no hay lío alguno. Colombia este rato es un hervidero de indignados cuestionamientos a los ex presidentes Pastrana y Gaviria por aparecer en la lista de capitales off shore. Pero en el Ecuador, la plutocracia calla: porque ella tiene igual conducta. Y la clase media aplaude, porque ha perdido toda ética.
Los medios en el país más hipócrita de América, le quitan toda mancha al manchado, con el inocente: «Pero se deshizo de las Offshore de Panamá antes de ser presidente».
Me recuerda el contraste histórico y ético entre la indignada y dignamente masiva conducta editorial de la prensa latinoamericana, gringa y europea denunciando la abyección de la teocracia tiránica de García Moreno, y la conducta yanacona de la servil prensa ecuatoriana en esos tiempos de García Moreno y su república consagrada al Corazón de Jesús. Los editoriales de América se solidarizaban con el Ecuador y depositaban sus esperanzas de que un día su sometido pueblo ignorante se liberara. Mientras tanto la prensa garciana y de la cúpula eclesiástica, sostenían el incienso y la alabanza aldeana.
Eso lo narra el proscrito historiador y revolucionario ecuatoriano Roberto Andrade en una de sus prohibidas obras hasta el día de hoy: «El 6 de Agosto de 1875».
No es casual que la prensa local y sus blogs digitales, pautados o yanaconas, no hayan cuestionado ninguno de los tres escándalos locales – mundiales citados. Ni hayan criticado la simbólica «segunda consagración garciana» hecha meses atrás por Lasso y sus paleo-libertarios en La Basílica, que custodia los restos del curuchupa íncubo fusilador.
Y que luego salgan con la estúpida muletilla de «Ponce correísta», por develar y cuestionar su vaciamiento ético; me trae sin cuidado. Como reza el epitafio de Sade «Fui perseguido en todos los regímenes».
Anexo un botón de la camisa: la BBC de Londres nombra a Lasso & Pandora Papers.