Quito, 29 dic (La Calle).- Los impactantes chats desde la prisión de Leandro Norero ofrecen una visión inquietante de la manipulación sistemática de la justicia ecuatoriana. En este último capítulo de revelaciones, el foco se dirige hacia la conexión entre Norero sus abogados, encabezados por Cristian Romero, y el juez Emerson Curipallo. Los detalles de estas conversaciones exponen una red de corrupción judicial que pone en entredicho la integridad misma del sistema legal del país.
Estos chats, parte integral del caso Metástasis, arrojan luz sobre la orquestación meticulosa de Norero y su equipo para liberar a dos de sus leales colaboradores, Steven Navarrete (‘alias Cuyuyuy’) y Santiago Madrid (alias ‘Madrid’), mientras simultáneamente tramaban comprar influencia en la Judicatura.
La estrategia propuesta por los abogados, que incluía la colocación de su propio director en la Judicatura de Santo Domingo mediante un pago de USD 25,000, revela la infiltración de la corrupción en el sistema judicial.
La forma en que operaba el juez Emerson Curipallo
En el núcleo de esta trama se encuentra el juez Emerson Curipallo, un actor clave que, según los chats, evidencia su disposición a aceptar sobornos y participar en prácticas judiciales cuestionables.
Ante la amenaza de suspensión, Curipallo no actúa con la imparcialidad esperada de un representante de la justicia, sino que busca activamente ayuda. Incluso reveló presiones desde «arriba» para resolver los casos de ‘Cuyuyuy’ y ‘Madrid’.
La liberación del brazo armado de Norero
‘Cuyuyuy’ y ‘Madrid’ fueron liberados según dispuso el juez Curipallo. Sorpresivamente, y tras estas acciones, el funcionario judicial permaneció en su cargo, a pesar de las acusaciones y amenazas de suspensión.
El juez Curipallo, además, solicitó dinero para «sobrevivir» si era suspendido. En medio de ese escenario, aparecería la figura del abogado Cristian Romero, encargado de convencer al ‘patrón’ de efectuar los pagos correspondientes a las operaciones realizadas por Curipallo.
Al final, Norero y sus abogados acordaron pagar USD 62,500 por cada liberación, una vez ejecutadas las boletas de excarcelación. No obstante, trascendió que la cifra total por la libertad de ‘Cuyuyuy’ y ‘Madrid’ sería de USD 200.000.
Ahora, tanto Curipallo como Romero son investigados en el marco del caso Metástasis: el primero está preso de manera preventiva; el segundo, prófugo.
