Publicidad

Video capta fatal choque en Santa Elena; liberaron al sospechoso

Apoya a Radio La Calle ($2,00)

Quito, 13 dic (La Calle).- El ciudadano Geovanny Rodditi salió en libertad, luego de ser acusado por “muerte culposa” tras ocasionar un accidente de tránsito por conducir en estado de ebriedad. El hecho ocurrió el pasado 11 de diciembre en la vía Santa Elena-Guayaquil.

Videos que circulan en redes sociales muestran cuando Roditti iba conduciendo el vehículo e impactó con otros dos automóviles. Como consecuencia de este accidente fallecieron dos personas y hubo varios heridos.

Según la Función Judicial, Roditti fue acusado por “muerte culposa”, pero el juez del cantón La Libertad, Augusto García lo dejó en libertad. Pese a las graves consecuencias que deja este accidente, el juez solamente le otorgó medidas sustitutivas. Es decir, el implicado tiene prohibido salir del país y está obligado a presentarse de manera periódica ante el fiscal a cargo.

Finalmente, dispuso que el proceso se resuelva de manera directa y se llevará a cabo el 3 de enero de 2023, a las 10:00.

Otra raya al tigre

En 2018, Roditti y su padre, Antonio Giovanni Roditti Viteri fue acusado por intento de homicidio, tras atacar a dos guardias de seguridad en una urbanización de Guayaquil.

Los registros de la Función Judicial indicaron que los acusados “intentaron ingresar por la entrada de residentes de la urbanización, sin embargo, el sistema automatizado TAG no detectó su dispositivo para levantar la pluma de manera automática. Eso provocó que el ciudadano descargue su irritación en nuestra contra”, según Ecuavisa.

Aunque quedó captado como Roditti golpea al guardia con un ventilador, el fiscal Edgar Escobar se abstuvo de acusarlos y salieron en libertad. También consideró que fue una “contravención” y no un delito, porque las lesiones de las víctimas no pusieron en riesgo la vida de los acusantes.

Además, el día de la audiencia presentaron una carta con la que autorizaban que los representen, pero con una la siguiente leyenda “La gente juzga por las apariencias, pero el señor mira el corazón”. (N.J.C)