Quito, 27 dic. (Radio La Calle).- El analista económico, Marco Flores, aseguró que “un millón de personas dejaron la clase media y cayeron en la pobreza”. Estas aseveraciones las hizo con base en estadísticas de la UNICEF.
Respecto al panorama del país, durante 2021, Flores señaló que el Ecuador vivió un retroceso en la economía, durante los últimos 5 años. “La disminución del gasto público, el incremento de la pobreza, el desempleo y un plan de activación económica hasta ahora incongruente, definen a la economía como un completo fracaso”, dijo.
Asimismo, aseguró que los principales indicadores que marcan el destino de la economía están ‘en rojo’.
Alrededor del 40% de la población ecuatoriana sufre de pobreza, según el INEC, lo que significa que casi 6 millones de personas son parte de esas estadísticas. De ese porcentaje, alrededor de 2.8 millones de personas, viven con menos de USD 1.50 diarios, es decir, se encuentran en la pobreza extrema.
En el ámbito laboral, 32 ecuatorianos de cada 100 poseen un empleo formal, lo que significa que solo este grupo de personas tiene un salario estable.
El panorama es aún más desalentador en materia de protección de derechos de la niñez, pues se necesita alrededor de 2.600 millones para salvar a toda una generación de niños que sufren pobreza y desnutrición. Según el analista, tres millones de niños se encuentran en riesgo.
Flores insistió en que no hay duda de que el gobierno implementa un plan económico acorde a las exigencias del Fondo Monetario Internacional. No obstante, el analista Flores alega que aún hay alternativas para que el país pueda salir de esta dura crisis.
“Tomar dinero del Banco Central para inyectarlo en la economía nacional y poder reestructurar la deuda son algunas alternativas, pero es una decisión política pues el Ministro de Finanzas debe aparecer como funcionario del Ecuador, no como funcionario del FMI” cuestionó.
El analista también planteó reducir el IVA, declarar tres días en el año sin cobrar IVA, reducir los aranceles y reducir, hasta eliminar, el impuesto a la salida de divisas.
Además, propuso implementar un salario diferenciado, que vaya acorde a la actividad y características del sector productivo al que pertenece el empleado.