Quito, 16 de jul (La Calle).- En Sudáfrica murieron 112 personas como consecuencia de los disturbios iniciados el 9 de julio debido al arresto del polémico expresidente Jacob Zuma.
Varios manifestantes salieron a las calles para defender al expresidente acusado de varios delitos como: Malversación de fondos, peculado, evasión de impuestos, lavado de dinero, etc.
Exceso de violencia
En los seis días de protestas se registraron quema de edificios y vehículos; calles y carreteras cortadas, saqueos en tiendas y centros comerciales; invasión en propiedad privada, etc.
Las fuerzas armadas desplegaron más de 10.000 efectivos en toda la nación. Las autoridades amenazaron con aumentar el contingente a 25.000.
La Policía halló seis cadáveres en el tejado de un centro comercial. Todavía se investiga si los cuerpos tienen alguna relación con las manifestaciones.
Simpatizantes de Zuma robaron e incendiaron 33 camiones.
Antecedentes
El 29 de junio, la Fiscalía sudafricana llamó a Zuma para que rindiera versión por varios delitos, no obstante, agotó todas la instancias para evitar su encarcelamiento. La policía apresó al exmandatario el 28 de junio.
El 10 de julio se produjeron la primeras muertes. Zuma es opositor del apartheid. Varios colectivos apoyan al exmandatario.
Dos personas son consideradas las posibles responsables de la protesta. Según el Gobierno, el objetivo de este grupo es el sabotaje económico.
En el transcurso de las manifestaciones, más de 2.000 personas han sido apresadas.
Khumbudzo Ntshavheni, ministra de Gobierno, afirmó que se el Estado está restaurando el orden después de una semana de disturbios.
