Quito, 19 ene (La Calle). – Según reporta el medio Tiempo Real, un ciudadano de aproximadamente 52 años falleció en la calle, en Plaza de Santo Domingo, en el Centro Histórico de Quito. Según los primeros reportes se trataría de la muerte de un indigente a causa de COVID-19.
El comandante del distrito Manuela Saénz de la Policía Nacional, Juan Carlos Soria, dijo que recibieron el reporte desde el ECU911. Asimismo, indicó están aplicando los protocolos establecidos con el Ministerio de Salud Pública y con criminalística. En los últimos días, además de este caso se han reportado el retiro de ocho cadáveres en viviendas.
La víspera, el COE metropolitano declaró a Quito en alerta roja ante el incremento de casos de coronavirus. Según la institución los casos se elevaron en 187%, durante la última semana del 2021 y la primera semana del 2022, debido a las festividades de navidad y año nuevo y a la aparición de la nueva variante, Ómicron.
Pese a que el presidente Guillermo Lasso minimizó la peligrosidad de la nueva variante, se han reportado el aumento de contagios, la saturación de unidades de cuidados intensivos y el exceso de fallecidos en la mayoría de cantones del país.
En Quito, según el COE, durante la primera semana del 2022, se registraron 5.836 casos. “Esta cifra es comparable a los momentos más complejos en olas anteriores, como lo suscitado en el pico de enero de 2021 y en la ola de abril y mayo del mismo año”, sostuvo la entidad en un comunicado.
Asimismo, el Comité recomendó mantener las clases virtuales hasta el fin del quimestre e impulsar la vacunación en docentes y estudiantes, pues informó que existe un aumento importante de casos entre niños y jóvenes de 10 a 19 años.
“La cifra pasó de menos un caso por cada 100.000 habitantes, en noviembre y diciembre de 2021, a 9.6 casos en la primera semana de 2022″, indicó la institución.
El presidente vive otra realidad
Lasso aseguró que las muertes en el país no han incrementado. Indicó que es molesto contagiarse con la nueva variante, pero que “solo es una gripe”.
«Estamos frente a una variante controlable, que no es mortal y que no está llevando siquiera a saturar las camas de los hospitales. (…) El Ecuador ha tomado precauciones, estamos viendo los resultados. Si es una molestia contagiarse del COVID, con la variante Ómicron, pero es como una gripe fuerte. Hoy no se llega ni siquiera a un fallecido por cada mil contagios», dijo en su espacio de los martes, Encontrémonos por la ciudadanía.