Quito, 03 ene (La Calle). – El general iraní Qassem Soleimani nació en 1957 en la provincia de Kermán, en el este de Irán; proviene de una familia de escasos recursos económicos. Soleimani no terminó sus estudios primarios; a los 13 años de edad empezó a trabajar como albañil.
En los inicios de su juventud, Soleimani estableció relaciones políticas con el ayatolá Jomeini, líder político de la Revolución islámica de 1979. Esto le permitió formar parte de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) y así participar en la Guerra Irán-Irak (1980-1988).
En este enfrentamiento que se tomó ocho años, el General Soleimani se posicionó como un hombre temerario y guerrero.
Una década más tarde, se le otorgó el cargo de jefe de las Fuerzas Quds, la unidad de élite del CGRI responsable de las operaciones especiales en el extranjero.
Ali Soufan, exagente del FBI, dijo hace un año que: “Soleimani ha sido más que nadie responsable de la creación de un arco de influencia, —que Irán llama su ‘Eje de Resistencia’—, que se extiende desde el golfo de Omán a través de Irak, Siria y el Líbano hasta las costas orientales del mar Mediterráneo”.
El Ministerio de Defensa de Rusia aseguro en un comunicado que “los méritos personales” de Soleimani en la lucha contra el Estado Islámico en el territorio sirio son “indiscutibles” y que además se destacó como “un dirigente militar cualificado, tenía una autoridad merecida e influencia significativa en toda la región de Oriente Próximo”.
En 2018, las tensiones entre Washington y Teherán se hacían más notorias. El General Soleimani se dirigió al presidente estadounidense, Donald Trump: “Le estoy diciendo, sepa que estamos cerca de usted en aquel lugar [donde] usted no piensa que estamos. (…) Usted empezará una guerra pero nosotros la terminaremos”, añadió.
En la madrugada de este viernes, Soleimani fue asesinado en medio de un bombardeo ejecutado por el Gobierno de Estados Unidos, en el aeropuerto de Bagdad. En el acto, murieron muchas personas más.
Tras el suceso, Irán prometió una “venganza severa”.
Un vocero del Gobierno iraní informó que en las siguientes horas su cuerpo de seguridad se instalará para analizar este “acto criminal del ataque”. Mientras tanto, el presidente iraní Hasán Rouhani informó en un comunicado: “Irán y las otras naciones libres de la región se vengarán de este horrible crimen del criminal EE.UU.”
Asimismo, El corresponsal de Al Jazeera en Teherán, dijo que habrá una respuesta defnitiva: “Su muerte a manos de EE.UU. es vista como un acto de guerra, y ciertamente recibirá una respuesta muy fuerte.
CLL