Quito, 17 jun (La Calle).- TITULAR: Un exhaustivo peritaje de 48 páginas realizado por la psiquiatra Ángela Salazar determinó que el exvicepresidente Jorge Glas padece un trastorno depresivo recurrente con «alto riesgo suicida», pero mantiene plena conciencia de sus actos y simula síntomas.
El informe, presentado el 11 de junio ante la Corte Nacional de Justicia, desaconsejó su traslado a un hospital psiquiátrico, ordenando su permanencia en la Cárcel La Roca de Guayaquil y continuar el juicio por presunto peculado en el caso Reconstrucción de Manabí.
La evaluación —realizada durante 36 horas— detalla que los 2.280 días de reclusión (desde octubre de 2017) y episodios de violencia carcelaria han agravado la salud mental de Glas. El exfuncionario relató insomnio crónico, restricción de visitas familiares desde enero de 2025, y afirmó: «Al estar despierto toda noche se refuerzan mis ideas suicidas». Reveló además su intento de autolisis en abril de 2024, cuando ingirió 60 pastillas.
Pese al diagnóstico de depresión grave, Salazar, especializada en criminología y medicina legal, identificó una «simulación consciente» de síntomas y una transformación persistente de su personalidad. Subrayó que su «conciencia, inteligencia y funciones cognitivas permanecen intactas», invalidando la solicitud de su defensa de aplicarle el artículo 76 del COIP (que prevé internamiento por inimputabilidad).
El Tribunal, presidido por la jueza Mercedes Caicedo, rechazó una nueva pericia solicitada por el abogado Andrés Villegas. El juicio —iniciado el 17 de junio— procesa a Glas y al exsecretario técnico Carlos Bernal por presunto desvío de fondos destinados a reconstruir Manabí tras el terremoto de 2016.
Contexto adicional
- Este es el cuarto proceso por corrupción contra Glas. Ya cuenta con condenas en los casos Odebrecht y Sobornos, mientras la relacionada al Caso Singue fue anulada en apelación. Glas denunció la falta de atención médica y medicación en La Roca, donde permanecería sin acceso a patio ni visitas.
«Alertamos a la comunidad internacional, la academia y profesionales del derecho sobre estas prácticas persecutorias que vulneran los principios universales del derecho internacional de DDHH», dijo el Comité por la Libertad de Jorge Glas.
Además, el colectivo señaló que constató el deterioro en la salud física del exfuncionario como producto de su detención prolongada y en condiciones que atentarían contra su integridad y vida.