Quito, 25 ago (La Calle).- Proveedores que prestaron servicios de seguridad, insumos de oficina e insumos médicos al Estado se movilizaron a Carondelet. La protesta solo pudo avanzar hasta la calle Mejía y García Moreno, porque el Palacio está cercado por policías y militares. Esta acción es parte de la política de seguridad del presidente Lenín Moreno, desde las manifestaciones de octubre.
Seguidamente, permitieron el paso a cinco dirigentes que participaban en la protesta, y que serían recibidos por una funcionaria del Ministerio de Gobierno. Marco Leguízamo, presidente de la Cámara de Computación y representante de la Plataforma de Proveedores del Estado indicó que: “El Gobierno no ha honrado sus deudas por falta de liquidez y ha propuesto pagarles con bonos, iniciativa que no ha tenido acogida”.
Este es uno de los casos de los miles de trabajadores que perdieron su trabajo y no reciben respuesta alguna por parte del Estado. Sin embargo, en un comunicado oficial, el Ministerio de Economía y Finanzas mencionó que el Ecuador recibió un aporte de 2 mil millones de dólares por parte de varios organismos como el Banco Mundial (BID), Fondo Monetario Internacional (FMI) entre otros. Nadie sabe si utilizarán este dinero para el pago de los salarios y responsabilidades que mantiene el Gobierno.
Finalmente, a través de una publicación en Twitter, el asambleísta Pabel Muñoz (RC), mostró un cuadro con datos provenientes del Banco Central y el Ministerio de Finanzas, donde evidencia una deuda pública de 42 millones de dólares.