Quito, 19 dic (La Calle).- La proforma presupuestaria 2023 entrará en vigencia sin las observaciones de la Asamblea Nacional, es decir, tal como se presentó el 31 de octubre de 2022 por el Ministerio de Economía.
El Legislativo había realizado siete observaciones el 29 de noviembre de 2022. Sin embargo, ninguna de estas fue acatada. Entre las peticiones estaba el aumento del gasto público, sobre todo en los presupuestos para la Policía Nacional y los sectores sociales (educación y salud). Asimismo, cuestionó como un dato subestimado la proyección del precio del petróleo (USD 64,8 por barril).
El Gobierno de Lasso remitió a la Asamblea su apertura a realizar ajustes el 7 de diciembre. Aunque especificó que cualquier cambio se ejecutará durante el presupuesto de 2023 y según los ingresos reales que obtenga.
Frente a esto, el Pleno de la Asamblea tenía un plazo de 10 días para reunirse y debatir la respuesta del régimen a sus siete observaciones. No obstante, los legisladores se fueron de vacaciones desde este lunes 19 de diciembre y regresarán 15 días después.
Al fin y al cabo, la Asamblea no sesionó sobre este tema por la vacancia. Por lo que sería la segunda vez que fracasa en su intento por cambiar la proforma de Lasso. Las primeras observaciones fueron devueltas por el Gobierno y se ratificó en la proforma de origen.
