Quito, 19 sep (La Calle). – Aunque los niveles de inseguridad y violencia en Ecuador se dispararon, la ministra de Educación, María Brown, enfatizó que las clases virtuales no son la mejor alternativa. Según ella, los centros educativos son los “espacios más seguros dentro de toda el caos que vive el país”.
Brown argumentó, en La Posta, que de los 147 casos de niños asesinados en lo que va del 2023, ninguno ocurrió “dentro de un plantel educativo”. De acuerdo con las cifras que presentó la ministra, 95 casos fueron en la vía pública, 23 en sus casas y al menos cinco en los parques. Sin embargo, hace unos meses dos menores de edad murieron luego de ser víctimas de atentados cuando se dirigían al colegio.
De la misma manera, varios padres de familia exigieron a la cartera de Estado que dé paso a las clases virtuales para proteger a sus hijos, pero la entidad mantuvo la negativa.
“Lo mejor es continuar con la presencialidad, pues con el otro método los jóvenes se convierten en puntos frágiles para el reclutamiento forzado, actividades ilícitas y pueden ingresar a lo grupos delictivos” dijo.
¡Cierto!, había un “Plan Escuela Segura”
En octubre de 2022, la Policía Nacional y los ministerio de Educación y del Interior crearon el “Plan Escuela Segura” para “reducir los niveles de inseguridad”. Sin embargo, a pocos días que la iniciativa cumpla un año no ha dado resultados positivos.
Para Brown, el plan contempla tres ejes: prevención, protección y protocolos de acción que fueron aplicados a 220 unidades educativas. Recalcó que la entidad “no puede extenderse de las facultades que le corresponde”, por lo que solicitó a los agentes que redoblen esfuerzos para cuidar a los niños y jóvenes. No obstante, los representantes de los estudiantes indicaron que los policías solo van a las instituciones para “tomarse una foto y se van”.
“También, se pidió que hagan una evaluación de lo que ha sucedido con el Plan y ver si tenemos que hacer arreglos o cambios”, mencionó.
“Abandono escolar”
La ministra confía y espera los resultados del censo 2022 para tener un dato exacto de los jóvenes que salieron de las escuelas. Según la servidora, las encuestas boca a boca que realizaron demuestran que la deserción escolar se debe a la inseguridad, embarazos adolescentes y falta de recursos.
“Eso también depende de la natalidad y si no hay niños las inscripciones en los planteles también cambiarán, pero ya se sabrá con los datos del censo”, afirmó.