Quito, 17 Jun (La Calle).- El Contralor subrogante del Estado, Pablo Celi no pudo hablar en la audiencia por el pedido de hábeas corpus presentado por su defensa. El funcionario estuvo hospitalizado por COVID-19. El Tribunal, sin embargo, negó el pedido y seguirá en la Cárcel 4 en Quito.
Su hija Alejandra Celi tomó la palabra y les indicó su preocupación a los jueces Katerine Muñoz, Alejandro Arteaga y María Mier. «Me preocupa que mi padre no llegue vivo al juicio», expresó.
Su abogado Francisco Moreno denunció la detención del funcionario es ilegítima y no se le ha garantizado el debido proceso. Además de mantener el virus de la COVID-19, Celi padece de deterioro visual progresivo.
Búsqueda de libertad
No era el primer intento de Celi, el 13 de mayo apeló a la prisión preventiva, pero el pedido fue desechado.
El 21 de junio se realizará en la Corte Nacional de Justicia una nueva audiencia de pedido de revocatoria a la prisión preventiva que solicitó la defensa del todavía Contralor subrogante.