Quito, 15 ago (La Calle).- Con pausas dubitativas y tartamudeos, el secretario de Seguridad Pública, Diego Ordóñez dijo que lo que se necesita en el país es una solución estructural, aunque no especificó de lo que trataría esa propuesta.
Tras el atentado con una bomba en el Cristo del Consuelo que ha dejado cinco muertos y 15 heridos por el momento y el incremento de la violencia, el funcionario expresó que las soluciones coyunturales «no solucionan el problema de fondo».
«Es una realidad muy compleja. Todos debemos entender su complejidad y dar una respuesta en esa complejidad. El presidente plantea, a través de esta secretaría, una estrategia orgánica del Gobierno para combatir el fondo: reducir el tráfico de drogas en el territorio ecuatoriano, de manera que signifique una reducción de la criminalidad», dijo en entrevista con FM Mundo.
Agregó que es necesario solventar el presupuesto de instituciones como el Servicio Nacional de Inteligencia para que trabaje articuladamente con la Policía Nacional. «Una estrategia que planteé una recuperación de los controles del Estado sobre la vía pública».
Ante la interrogante de cuándo estarán lista estas estrategias, Ordóñez dijo que ya están funcionando. «No es que se lo puede ver. Estos temas se manejan con un nivel de confidencialidad. Todo esto está en proceso. Hay una agenda de seguridad y un plan de inteligencia. Es como construir la obra que no se ve al armar un edificio».
Situación de la Superintendencia de Bancos
Sobre una nueva intervención del Gobierno en la posesión de Raúl González como superintendente de bancos por la Asamblea Nacional, el secretario dijo que es la primera vez y puso la culpa en el Legislativo.
«El presidente de la Asamblea dijo que quería un diálogo con el Gobierno. Hemos respondido por escrito indicando sobre la mesa de diálogo y se definieron temas, pero existe falta de coherencia y respeto. No hay una línea creíble sobre la intención de la Asamblea».
Para Ordóñez, la posesión es un «evidente acto de provocación. Dejan de respetar la decisión de un juez constitucional y empujados por una mayoría, donde se juntan nuevamente el Partido Social Cristiano y el correísmo, hacen una posesión ilegal». MIB