Quito, 30 dic (La Calle).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció, en las últimas horas, que la propagación acelerada de la variante Ómicron podría provocar un gran aumento de personas hospitalizadas, aunque sea menos peligrosa que sus antecesoras.
El Director General de la OMS, Tedros Adhamon, señaló que “la variante Delta y Ómicron son ahora dos amenazas gemelas que hacen que los casos alcancen cifras récord”. Por ello, advirtió que con las nuevas variantes de la COVID-19, en un futuro muy cercano, se registraría un “ola de contagios”, peor que su antecesora. “Tan solo en la última semana hubo 5 millones de nuevos casos”, señaló.
Aunque algunos estudios y reportes científicos, como el realizado por el Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas (CSSE) de la Universidad Johns Hopkins, indican que en Sudáfrica no sólo han empezado a caer ya los contagios por COVID-19, las cifras señalan que el número de fallecidos sigue siendo moderado y están lejos de las que hubo con las olas anteriores. Incluso, sostienen los estudios, que la variante Ómicron es más benigna.
Los expertos en el tema aún se encuentran estudiando el origen interno de la variante o si existe una relación directa con la afectación de la humanidad ya inmunizada.
Por su parte, una de las principales responsables de OMS Europa, Catherine Smallwood, manifestó a la agencia de noticias AFP, que “sería demasiado pronto decir, si la ola de Ómicron será más o menos grave que la de Delta«. Contrario a todo, otros expertos sostienen que un mayor contagio en la humanidad podría anular la ventaja de una variante menos peligrosa.
Los gobiernos seguirán evaluando la habilitación de tests y la inmunidad inducida por las vacunas contra la variante Ómicron.