Quito, 22 mar (La Calle).- Una ola de crímenes azotan el país. Los registros de asesinatos a comparación del 2021 indican que las cifras han aumentado un 155,45%. Desde el 1 de enero del 2022 hasta el 21 de marzo, se han registrado 281 asesinatos en Guayaquil, Durán y Samborondón. Es decir, se registraron 110 muertes violentas más que el año anterior en el mismo periodo.
Desde el inicio del 2022, la ciudad más afectada por estos hechos es Guayaquil y sus cantones vecinos, que conforman la Zona 8.
En varios reportes, la Policía asocia estos hechos de violencia a una disputa de bandas y el narcotráfico. Además, estas cifras han aumentado al punto en que los ciudadanos temen por sus vidas al momento de salir a las calles.
Pese a los diversos operativos de las autoridades, aún no se ha logrado frenar la ola de muertes violentas. Asimismo, la Dinased a través de los agentes policiales levantan información con los familiares de las personas fallecidas y testigos. Sin embargo, muchos de los testigos de estos hechos prefieren guardar silencio por temor a represalias.
Este lunes, un conductor fue sorprendido por presuntos sicarios, en el norte de Guayaquil. El ciudadano falleció dentro del vehículo a causa de los tiros que recibió. El fin de semana se registraron dos casos de sicariato. Uno en el que falleció un adolescente de 15 años en Durán y otro en el que dos menores de edad resultaron heridos por sicarios, en Bastión Popular, al norte de Guayaquil.
Asimismo, se reportó el fallecimiento de una mujer de 50 años, acribillada por individuos que circulaban en un vehículo y una moto. El hecho ocurrió en el bloque 10 de Bastión Popular.
