Quito, 13 de nov, (La Calle).-El número de fallecidos por la crisis carcelaria en el Ecuador supera todo cálculo. Los primeros reportes extraoficiales hablan de que ayer, tras un nuevo episodio de violencia, habrían fallecido cerca de 51 personas privadas de libertad, (PPL) tras una brutal jornada en los pabellones de la Penitenciaría del Litoral.
La crisis se desató, según reportes de redes sociales, a las 19h00, cuando presos de un pabellón empezaron un ataque por entrar en otro. La Policía acordonó los exteriores de la prisión, sin embargo, los presos transmitieron en vivo y en directo la masacre por redes sociales. Las imágenes que se han difundido dan cuenta de varios hechos abominables: quema de cuerpos en los patios, sangre como ríos y pánico en el centro de la escena. En otra imagen se observa a un dron iluminando los patios. Fue una noche de terror en medio de gritos de los presos solicitando acción policial.
Lasso de frac
Las masacres penitenciarias en Ecuador superan a las de toda la región, inclusive a las de Brasil y El Salvador, pero la sangre y las lágrimas de familiares de los detenidos parecen no conmover, no es lo suficientemente profunda la angustia de la población frente a este panorama que oscurece alma nacional día tras día. Ayer, justamente a la hora de los enfrentamientos el Presidente de la República asistió a una fiesta de los Marines de Estados Unidos. Lasso, el ministro de Defensa Luis Hernández, el Gobernador del Guayas y otros lucían frac para estar a la altura de la reunión. Sonreían.
Desde que esta crisis inició el gobierno ha tenido escasas acciones directas para controlar el problema. La primera, la declaratoria del Estado de Excepción, el cambio de autoridades del sector carcelario, el resto han sido discursos que buscan culpabilizar del tema al gobierno de la Revolución Ciudadana, (2007-2017). Pero nada, las masacres no se detienen con palabras, la crisis que inició con Lenín Moreno sigue desangrando los pabellones del Ecuador.