Quito, 19 mar (La Calle).- El presidente Daniel Noboa hizo un llamado urgente a la comunidad internacional, especialmente a Estados Unidos, Europa y Brasil, para que apoyen a su país en la lucha contra el narcoterrorismo. Noboa solicitó específicamente al presidente estadounidense, Donald Trump, que designe a las bandas criminales ecuatorianas como grupos terroristas, siguiendo el precedente establecido con carteles de México y Venezuela.
Noboa detalló cómo Ecuador ha enfrentado un aumento alarmante de la violencia en los últimos años, vinculada al narcotráfico. Lo que comenzó como bandas criminales locales ha evolucionado hacia estructuras internacionales de narcoterrorismo, con aproximadamente 14.000 personas armadas operando en el país.
«El 70% de la cocaína del mundo sale a través de Ecuador. Necesitamos la ayuda de fuerzas internacionales para combatir esta guerra», declaró el mandatario en entrevista con la BBC.
El primer mandatario enfatizó que grupos como Los Lobos, Los Choneros y Los Tiguerones ya no son simples pandillas, sino organizaciones complejas involucradas en extorsión, tráfico de drogas, personas y órganos, así como en minería ilegal. «Son grupos narcoterroristas internacionales que operan en varios países. Me alegraría que Trump los considerara grupos terroristas, porque eso es lo que realmente son», afirmó Noboa.
Cooperación internacional y reformas constitucionales
Noboa reveló que ha ordenado a la Cancillería ecuatoriana buscar acuerdos de cooperación con países aliados para fortalecer a las fuerzas de seguridad locales. Además insistió en el regreso de bases militares extranjeras a Ecuador, una medida que ha generado debate en el país. «Necesitamos más soldados para luchar en esta guerra. Fuerzas especiales de Estados Unidos, Europa y Brasil podrían ser una gran ayuda», sostuvo.
El presidente también abordó su reciente alianza con Erik Prince, fundador de la controvertida firma de seguridad privada Blackwater. Noboa explicó que Prince está asesorando a las Fuerzas Armadas y a la Policía en una «guerra de guerrillas urbana no convencional». Sin embargo, aclaró que no se trata de traer mercenarios, sino de contar con el apoyo de ejércitos extranjeros. «Las leyes ecuatorianas deben respetarse, pero estamos luchando contra grupos que han violado todos los derechos humanos posibles: mutilaciones, violaciones, tráfico de órganos y más», denunció.
Críticas y desafíos
A pesar de las medidas implementadas, Noboa enfrenta críticas por el aumento récord de homicidios en enero de 2025, con 781 casos registrados. Sus rivales políticos, como Luisa González, han cuestionado la efectividad de su estrategia de militarización de calles y cárceles. «Las promesas de campaña debían cumplirse en un año y medio, no en dos o tres. ¿Las cumplió? ¡No!», afirmó González en un mitin reciente.
Noboa, sin embargo, defendió su enfoque y argumentó que la violencia suele aumentar antes de las elecciones. Reiteró que la nación no puede combatir este problema solo, ya que se trata de un crimen transnacional que requiere una respuesta coordinada internacional. «Este es un crimen transnacional sin una política de seguridad transnacional. Necesitamos ayuda internacional», insistió.
También instó a los países consumidores de cocaína, como el Reino Unido, a asumir una mayor responsabilidad en la lucha contra el narcotráfico. «El producto que están consumiendo tiene una cadena de violencia y miseria», afirmó.
Mientras Ecuador se prepara para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el 13 de abril, la seguridad sigue siendo el tema central. Noboa espera que su llamado a la cooperación internacional resuene más allá de las fronteras ecuatorianas, en un esfuerzo por detener una crisis que amenaza con desbordarse.
