Pamela Benalcázar Villalba
Quito 15 feb (La Calle) .- Sigifredo Aldás, miembro del Colegio de Ingenieros Civiles de Pichincha, aseguró que no existe presupuesto para monitorear las zonas de riesgo en Quito. “El municipio debe poner en su presupuesto un monto para actualizar y realizar nuevos estudios”, dijo.
Para ejemplificar, citó los estudios realizados en las laderas del Pichincha, hace más de 20 años. Afirmó que el proceso significaba alrededor de 90 millones USD. “Hoy no hay ni dinero ni informes actualizados”, sostuvo en una entrevista con Radio la Calle.
Mencionó que para implementar un sistema de alerta temprana, ante desastres como el ocurrido en la Gasca, es necesario un monitoreo constante.Sin embargo, son inexistentes.
“La amenaza continúa, Quito sigue en riego”, aseveró. Asimismo, explicó que fenómenos naturales como un sismo pondrían en peligro la vida de todos os quiteños por la mala planificación “No es para asustar a la gente, pero Quito no está preparado para un sismo mayor de 5.5 grados”, dijo.
Para Aldás, a pesar de que existan leyes y ordenanzas que regulen las construcciones en la ciudad, esto es un tema netamente político. “Las autoridades no ponen la debida atención ni cuidado al tema. La planificación urbana muchas veces las dejamos en el papel”, aseveró.
No existe una visión técnica en el municipio
El experto aseguró que el comité de crisis debe estar formado por técnicos y que en el desastre de la Gasca se vieron pocos profesionales especializados en el tema de construcción.
Desde el Colegio de Ingenieros Civiles de Pichincha propone una una relación mutua entre los gremios, la academia y el municipio para prevenir otro desastre. “Hago un llamado para que nos tomen en cuenta”, puntualizó.
Aldás sostuvo que hay una expansión urbana no controlada, tráfico ilegal de tierras, inadecuado manejo de residuos sólidos y que las autoridades no han tomado las precausiones necesarias.
Además, explicó que no existe una zona específica donde se necesite intervención inmediata del municipio por que “todo es urgente”.
Asentamientos irregulares
El ingeniero civil dijo que el 65% de las construcciones son ilegales en Quito. El factor económico es uno de los factores para que las personas construyan sus casas en zonas peligrosas. No obstante, también influye el extenso papeleo y la demora en los trámites de regulación, pues pueden tomar hasta ocho meses.