Quito, 29 sept (La Calle).- El viaje a Estados Unidos del presidente Lasso al parecer no merecía interrupciones. Ni siquiera por la desaparición de la abogada María Belén Bernal, un caso de preocupación nacional donde se relaciona el Estado.
El mismo día que Lasso dio el discurso en la ONU pidiendo ayuda para combatir la violencia de género, refiriéndose a este caso, no fue capaz de llamar a Elizabeth Otavalo que tuvo que reconocer el cuerpo de su hija, encontrado 10 días después en el cerro Casitagua.
Elizabeth contó en una primicia para Radio La Calle que el acercamiento llegó 18 días más tarde.
«A los 18 días tuve un acercamiento con el presidente de la República dónde pregunté qué pasó con mi hija. Ofreció disculpas públicas como Estado y reconoció el involucramiento del Estado porque fue dentro de una institución policial«, relató.
El presidente le hizo una pregunta. «Me dijo ¿qué quieres? simple, dije. Quiero justicia y verdad ¿qué pasó con María Belén? 18 días de su desaparición y Germán Cáceres no aparece ¿usted cree que si no hubiera presión mediática hubiera aparecido María Belén? eso le dije.
