Quito, 15 abr (La Calle).- El presidente electo, Guillermo Lasso, repasa la posibilidad de tener cuatro días de feriado para bajar el porcentaje del impuesto al valor agregado (IVA) para mejorar el gasto y consumo durante esos días de vacaciones.
«También para reactivar la economía y el sector turístico, queremos proponer la opción que durante cuatro feriados al año pueda bajar el IVA», dijo Lasso en una entrevista con CNN.
La idea de Lasso no es nueva. En 2020, Colombia tuvo dos días sin IVA, una jornada que los compradores aprovecharon, a pesar del aumento de casos Covid-19 por el repunte de la pandemia.
Tras la propuesta, vale la pena preguntarse si esta medida reactiva la economía como expresa el nuevo presidente.
El caso de Colombia
«Fue una iniciativa que Duque propuso desde el inicio de la campaña. La intención de los días sin IVA es incentivar el consumo. Se aplica sobre unos bienes con base en un monto específico (USD 1.000 en este caso). Colombia tiene un IVA del 19% por lo que es un descuento muy significativo. Además del consumo, incentiva la producción y sus elementos como el trabajo», explica el analista político Álvaro Chamorro a Radio La Calle.
Pero…
Aunque el consumidor se beneficia, a juicio del experto, los «ganadores son las grandes empresas porque el descuento del IVA se aplica solo si se paga con tarjeta no con efectivo. Eso implica que los que terminan ganando son los grandes establecimiento comerciales y los bancos».
¿Cambia la economía con lo del IVA?
«En términos estructurales, creo que no cambia en nada la economía de los países. Los que ganan son el sistema financiero, las grandes plataformas económicas, los almacenes de cadena. Los productos que se consumen son importados, por lo tanto la industria nacional tampoco crece. Normalmente, los gobiernos neoliberales llevan esta frase de ‘la felicidad pasa por ir de compras’ y este consumo da una sensación de bienestar efímera», precisa.