Quito, 23 sep (La Calle).- Durante su discurso en la Asamblea General de la ONU, el presidente Guillermo Lasso aseguró que la migración es una clara señal de que los ciudadanos del mundo quieren más integración.
“Cuando migran los ciudadanos están concretando, en la práctica, la integración que sus autoridades no nos atrevemos a generar. Están dispuestos a cruzar continentes, a nuevas sociedades que les provean de más y mejores oportunidades. Quieren acceder a mercados globales de empleo, educación y a un mundo cada día más conectado por la tecnología, pero separado por equivocadas políticas proteccionistas”, sostuvo.
Asimismo enfatizó en que más vale estar conectados a través del comercio libre, que a través de la migración forzada, causada por prácticas que aíslan, encierran y solo limitan los espacios de prosperidad compartida.
“Tarde o temprano los ciudadanos buscarán su libertad económica. El ser humano buscará oportunidades. Nosotros creemos que debemos facilitar este impulso natural y no bloquearlo, porque el único resultado del bloqueo son las tragedias que vivimos hoy en día”, aseguró.
Lasso sostuvo que este drama humano no es nuevo para los latinoamericanos. En ese sentido, recordó que Ecuador no permaneció indiferente ante la salida de millones de venezolanos de su Patria.
“Ecuador ha respondido de manera fraterna. Hemos acogido alrededor de 433 mil ciudadanos venezolanos, que se beneficiaron de un solidario proceso de regularización», señaló.
Mencionó que el Ecuador ha sufrido un incremento de población migrante, que se expone a «inimaginables riesgos en sus intentos por alcanzar países como Estados Unidos”.
Hizo un llamado a los países para profundizar las relaciones comerciales con Ecuador. Una de las soluciones para este problema, dijo, radica precisamente en acercar los mercados a los ciudadanos, en lugar de obligar a los ciudadanos a migrar hacia los mercados.
Las cifras
Desde enero hasta agosto de 2021, alrededor de 90.000 ecuatorianos salieron del país. Solamente en julio se registraron 20.000 deportados de los Estados Unidos y México, además de 400 niños que abandonaron Ecuador y aún no regresan.
Actualmente, en Estados Unidos existen las deportaciones rápidas. Es decir, los migrantes no tienen derecho a un abogado o un juez, tampoco a quedarse en un refugio estadounidense. Son deportados inmediatamente a México.
Según un trabajo periodístico de The Dallas Morning News, la mayoría de migrantes ecuatorianos están buscando trabajo después de que la pandemia los dejara sin empleo o cortara sus principales fuentes de ingresos. El Ministerio de Trabajo de Ecuador informó que se perdieron más de 700.000 puestos de trabajo entre marzo de 2020 y marzo de 2021.