Quito, 20 abr (La Calle).- Guillermo Lasso, presidente electo del Ecuador, defendió la actuación de Colombia al bombardear la zona selvática llamada Angostura en marzo de 2008.
«Operativos como el sucedido en 2008 conforman evidentemente la figura del Estado de necesidad. Creo que no existió el interés del gobierno colombiano en invadir el Ecuador. Más bien actuar en defensa de su seguridad», dijo el presidente electo a Noticias Caracol.
Si una situación así volviera a repetirse, el presidente indicó que «nosotros trabajaremos estrechamente con el gobierno colombiano para lograr la seguridad en la región».
Sobre la reiniciación de fumigaciones con glifosato en el vecino país, Lasso dijo que confía en que el gobierno colombiano respete los acuerdos de no fumigación en territorio ecuatoriano.
El expresidente Rafael Correa reaccionó a las declaraciones de Lasso de un bombardeo que el exmandatario calificó como «una violación a la soberanía del Ecuador».
«¡Increíble! ¡Un presidente electo que defiende bombardeo a su Patria!
Con el argumento de “defensa de la seguridad.”, podríamos entonces bombardear Colombia cuando secuestren a nuestros periodistas allá.
Realmente, ¡increíble! Abrazo, hermanos colombianos, y que cese la violencia», escribió en un tuit.
El bombardeo
En el gobierno de Correa, uno de los acontecimientos que resquebrajó la relaciones entre Ecuador y Colombia fue la Operación Fénix, también conocido como el bombardeo de Angostura.
El 1 de marzo de 2008, un grupo de militares y policías colombianos ingresaron a Angostura, un lugar de la selva cerca de Santa Rosa de Sucumbíos. 22 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) murieron en el bombardeo, incluido el comandante Raúl Reyes.
La situación se agudizó cuando se identificó al ecuatoriano Franklin Aisalla como una de las víctimas. El gobierno de Correa demandó ante la Organización de Estados Americanos al gobierno colombiano, comandado entonces por Álvaro Uribe.