Quito, 25 feb (La Calle). – El presidente ecuatoriano Guillermo Lasso afirmó que no llamará a muerte cruzada. Durante una entrevista con Carlos Vera, el mandatario manifestó que los ecuatorianos tendrán tiempo para decidir sobre este mecanismo.
“No podemos jugarnos el futuro del Ecuador como si fuese un casino (…) tenemos que andar con cuidado porque tenemos un objetivo, pensar en la prosperidad de la familia ecuatoriana”, dijo.
La muerte cruzada es un recurso que dispone la Constitución para disolver el poder legislativo y obligar al Consejo Nacional Electoral (CNE) a convocar a comicios, en un plazo máximo de seis meses, con el fin de renovar autoridades tanto del Gobierno central como de la Asamblea.
Aunque el presidente afirmó que no aún no es tiempo de llamar a muerte cruzada, no descartó la posibilidad de hacerlo en un futuro.
Algunos asambleístas apegados al oficialismo, como Fernando Villavicencio, y otros contrarios, como la bancada de UNES, contemplan esta opción y se muestran abiertos a la posibilidad de usar de este recurso.
Situación en la Asamblea
El movimiento Unión por la Esperanza (UNES) emitió un comunicado donde expresó que si el Gobierno no va a trabajar por las personas, se irá a muerte cruzada. Asimismo, la bancada rechazó el accionar de la Guadalupe Llori, presidenta del Legislativo.
Llori suspendió la sesión prevista para este jueves, donde se planificaba cambiar el orden del día e incluir una moción para evaluar la gestión de la funcionaria como presidenta de la Legislatura y como mienbro del Consejo de Administración Legislativa. Tras suspender la sesión, abandonó las instalaciones de la Asamblea . Además, ordenó el corte de energía en la sede.
Llori, por su parte, acusó a los asambleístas de intentar tomarse por asalto el poder legislativo.
Por otro lado, el mandatario también se pronunció sobre la intención de la Asamblea Nacional de evaluar y destituir a Guadalupe Llori y dijo que es una actitud claramente conspiradora contra la democracia y la institucionalidad.
