Quito, 20 de agos, (La Calle).-La mirada pasaba de un stand a otro en la Feria “El Austro del país en la capital de los ecuatorianos”. Evento organizado por la Cooperativa Jardín Azuayo.
La idea: traer el Austro a Quito. Y el Austro son artesanías, forjas de hierro, sombreros de paja toquilla, además de bebidas y comidas, tan deliciosas como patrimoniales.
En los exteriores de la plataforma financiera las historias circulaban a mayor velocidad que los vientos de agosto. Allí estaba Rosa Inga, socia de la cooperativa desde 1995, dos años después del desastre de La Josefina, tragedia que unió a estos emprendedores del cantón Paute, como a otros de la provincia.
“Perdí todo cuando se rompió el embalse, pero seguí adelante, gracias a la cooperativa”, afirma mientras sirve una deliciosa Yaguana, bebida tradicional, al estilo de un “come y bebe”, donde coexisten en complicidad: chamburos, moras, sandías, naranjas, limones, piñas y babacos. Decir que esta bebida es deliciosa sería una repetición. Al igual que el rosero, que parece un colada, hasta que el ácido de las frutas tropicales prende en el paladar.
De yaguanas y otras delicias
Santiago Montenegro, gerente de la cooperativa, se tomó como tres yaguanas, antes de conversar con nosotros.
“Esto es un sueño, más allá de la bebida, el sueño es extender los beneficios de la cooperativa. Queremos incidir en la mejora de la calidad de vida de los ecuatorianos”. Por tal razón, la cooperativa creó un fondo para comunicadores despedidos de medios de públicos y el Instituto Superior Tecnológico de Economía Popular y Solidaria, “nos interesa la gente”, comentó Santiago Montenegro, mientras improvisaba unos pasos al compás de una banda de pueblo, que como el sol del mediodía, se abría paso entre la multitud, rotundo y luminoso.
Radio La Calle transmitió a toda la colectividad las incidencias de esta feria.