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Instituciones educativas plantean estrategias para cubrir vacíos académicos

Samanta Calderón, redactora

Quito 15 de junio (La Calle). – A inicios de junio, María Brown, ministra de Educación anunció el retorno voluntario de 1.301 planteles educativos en el país.

Frente a este escenario, María Elena Narváez, directora de educación online de la Universidad Internacional SEK, detalló la aplicación de una metodología para integración adecuada de los estudiantes en su regreso a las aulas.

“Se debe realizar actividades que integren evaluaciones de conocimiento como la metodología ABP, que es basada en proyectos. Esto nos permitirá conocer el estado en que se encuentra el estudiante”.

La metodología ABP es una estrategia didáctica, en la cual los estudiantes se enfrentan a problemas con diferentes escenarios, para ser resueltos a partir de conocimientos previos.

Según la “Revista Educar” las características principales de la ABP son: fortalecimiento de las materias, transferencia de los aprendizajes a situaciones reales y aumento de las capacidades de los estudiantes para trabajos autónomos y colectivos. 

Para Narváez, los docentes deben motivar a sus alumnos para el cumplimiento El nivel educativo ha cambiado durante los 15 meses de implementación de las clases online. Los niños, niñas, adolescentes y jóvenes se adaptaron su hogar en un espacio educativo y regresar a las aulas genera otro gran cambio en sus vidas.

Especialistas de salud recomiendan un acompañamiento psicológico que permita conocer su estado emocional.

Clases híbridas 

Desde el 7 de junio la Universidad Internacional SEK fue una de las instituciones educativas que recibieron a los alumnos sus instalaciones de forma presencial.

La Universidad fue una de las primeras instalaciones que fue aprobada el plan de retorno voluntario implementado por el Ministerio de educación, incluso antes de el ingreso del nuevo Gobierno.

Esteban Andrade, vicerrector académico de la Universidad Internacional SEK explicó que, “la primera fase del retorno está relacionado con las actividades prácticas en las carreras que demandan el uso del espacio práctico. En una segunda fase se implementará más aulas hibridas para las clases comunes. Y para el periodo de septiembre esperamos un regreso total de la comunidad estudiantil”

Las clases hibridas que se imparte en el Universidad se dan únicamente en los laboratorios.

El aforo de estas aulas es del 30%, es decir que asiste aproximadamente 9 o 10 alumnos de forma presencial, mientras que los alumnos restantes reciben la clase en tiempo real desde su casa. 

La directora educativa aseguró que “El 60 % de los estudiantes que necesitan de los laboratorios para desarrollar la parte práctica de sus estudios ha decidido retornar a la Universidad”.

Muchos de los estudiantes que deciden volver a los espacios educativos son aquellos que cuenta con un su propio medio para transportarse o no tiene ningún factor de riesgo en su hogar.