Quito, 16 jul (La Calle).- Como si se tratara de un verdugo que escoge a quién ejecutar y a quién no, la gerente editorial (e) de los Medios Públicos, Carla Maldonado, empezó este jueves su trabajo de «descorreizar» a la empresa pública.
Este jueves, periodistas de El Telégrafo confirmaron a Radio La Calle que recibieron una llamada personal por parte de Maldonado. Ella también funge como directora del medio público. La misión: «saber si quiero quedarme a seguir trabajando o prefiero que me liquiden de una vez».
La llamada telefónica de Maldonado fue dirigida únicamente a aquellos periodistas que no se encuentran tildados como «correístas» por ella mismo.
Es por eso que, según los empleados de El Telégrafo, las llamadas telefónicas no llegaron a aquellos funcionarios que no pertenecen al círculo cercano a Maldonado. Entre los excluidos están aquellos que presentaron denuncias por acoso laboral contra la directora.
El mayor número de personas que se acogieron a la opción de liquidación llegó desde la redacción de Guayaquil.
Desacato al Ministerio de Trabajo
El 27 de mayo de 2020, el Ministerio de Trabajo emitió el Acuerdo Ministerial MDT-2020–0119. En él, ordenó que, para las desvinculaciones de los colaboradores de las instituciones en proceso de supresión, los directivos deben considerar tres puntos.
El primero a tomar en cuenta gira en torno a las evaluaciones de desempeño: serían desvinculados los trabajadores que tengan una calificación porcentual igual o inferior a 89.99%.
El segundo punto se refiere a los contratos de servicios ocasionales. Los directivos deben liquidar a los servidores que mantengan contratos bajo la figura de servicios ocasionales.
Finalmente, el Ministerio de Trabajo también ordenó que liquiden a los empleados que mantengan nombramiento provisional.
