Quito, 18 jul (La Calle).- Adriana Ortega, hermana de la víctima de presunto femicidio, Paola Ortega, denunció que el supuesto actor intelectual del hecho, Christian N., pidió medidas sustitutivas para salir libre. «Con eso él podría escaparse», dijo para Radio La Calle.
El miércoles 19 de julio, se llevará una audiencia en el Complejo Judicial Rumiñahui, en la que se decidirá si el sospechoso es apto para recibir otras medidas. Christian N. está detenido desde enero de 2023.
«Nosotros como familia nos sentimos indignados de ver el proceder de este señor que a pesar de todas las evidencias que ha recogido Fiscalía y Dinasec, y pesé a que todo apunta a que él es el actor intelectual del asesinato de mi hermana, pidan libertad», explicó.
De la misma manera, sostuvo que el implicado ejecutó su plan «como todo sicario», pues depositó USD 2 mil, mientras Paola se desangraba en el vehículo. Sin embargo, a pesar de que las pruebas sobren, piden medidas sustitutivas para que salga Christian.
«Como familia estamos dolitos, porque no sabemos que decisión va a tomar la Fiscalía y la señora jueza que está a cargo del caso», afirmó. Además, comentó que si le preocupa que el supuesto femicidad salga libre porque «se podría fugar».
El plantón para exigir «Jusiticia por Paola», se concentrará desde las 14:00 en los alrededores del Complejo Judidicial, este miércoles.
El caso
El 2 de enero del 2023, Paola Ortega fue asesinada por supuestos delincuentes. Sin embargo, días después se descubrió que los dos implicados siguieron las órdenes de Christian N., esposo de la fallecida.
La noche del incidente, el procesado habría recogido a Paola de uno de sus locales y la habría llevado para comprar comida. Él se bajó de la camioneta en la que se movilizaban y dejó a la víctima dentro, en seguida, dos sujetos la apuñalaron.
Lo curiosos del hecho, es que Christian no regresó rápido al vehículo; además, que dejó abierta la puerta del mismo. Minutos más tarde cuando el regresó con los alimentos, Paola ya se encontraba herida, y él no pidió ayuda, ni se movió hacia una casa de salud, pesé a que a unas cuadras había una clínica.
Christian lo que hizo fue sacar su celular y pagar a los presuntos ladrones. «Los tres negaron ser participes del asesinato«, manifestó para La Calle, María Piedad Alcocer, madre de la víctima.
Paola vivía en la parroquia de Sangolquí y tenía dos hijas; una de 15 y otra de cuatro años. Además, contaba con un local cerca de su domicilio y otro en Quito, en ambos vendía artículos para fiestas.
El informe de Fiscalía
Videos analizados por la Fiscalía muestran cuando el sospechoso desbloquea el seguro de la puerta de la camioneta con el control remoto y minutos más tarde los implicados apuñalan a Paola.
En el informe, la Institución relata que el esposo salió del local, regresó a ver al lugar donde estaba su esposa, caminó hacia el vehículo y nuevamente regresó. Se dirigió otra vez al auto, llegó a la esquina, habló por teléfono, caminó una cuadra, volvió y llegó al auto.
FGE aseguró que los sujetos que asesinaron a Paola habrían visitado a Cristian en el local que ella tenía. «Esto muestra que el crimen iba a cometerse», señaló Fiscalía.
Según el Código Orgánico Integral Penal (COIP), el femicidio tiene una pena de 22 a 26 años de prisión. (DCJ)